Global Air, la aerolínea dueña del avión que se precipitó a tierra en La Habana, Cuba, el pasado 18 mayo y que les provocó la muerte a 112 personas, entre las que se encontraban un matrimonio de argentinos oriundos de Mar del Plata, afirmó que la tragedia se produjo por un “error humano”.
En un comunicado publicado en la cuenta oficial de Twitter de la firma mexicana que alquiló una de sus naves a Cubana de Aviación se afirma que una maniobra de los pilotos generó el accidente por despegar con “un ángulo de ascenso muy pronunciado”.
“Las investigaciones de las autoridades cubanas revelan que la tripulación despegó la aeronave con un ángulo de ascenso muy pronunciado, creando una falta de sustentación que trajo como consecuencia el desplome de la aeronave”, expresó la compañía.
El avión accidentado debía cubrir la ruta de cabotaje entre La Habana y Holguín, una provincia a casi 700 kilómetros de la capital en la que residían 67 de las 112 víctimas.
La cubana Mailén Díaz Almaguer, única superviviente del accidente aéreo, está estable y responde favorablemente al tratamiento, aunque permanece en estado “crítico” por las afectaciones respiratorias que padece.
Los compatriotas fallecidos en el accidente son un hombre y una mujer que se encontraban vacacionando en la isla caribeña.
Se trata de Dora Beatriz Cifuente y Oscar Hugo Almarás quienes eran oriundos de la ciudad de Mar del Plata.