Con 14.000 millones de dólares en pérdidas y 670.000 empleados suspendidos, el Congreso de Estados Unidos destrabó el conflicto que mantuvo paralizado al gobierno durante más de seis semanas.
El Gobierno de Estados Unidos retomará este jueves sus funciones plenas luego de que el Congreso aprobara el nuevo presupuesto federal, cerrando así el período más extenso de inactividad estatal del país.
La votación final en la Cámara de Representantes fue de 222 votos a favor y 209 en contra, y el presidente Donald Trump firmará la medida para normalizar el funcionamiento de las agencias públicas. El Senado ya había dado su aval el lunes.
Durante la parálisis, más de 670.000 trabajadores fueron suspendidos temporalmente sin sueldo, mientras los aeropuertos y servicios públicos operaron de forma limitada. La Oficina de Presupuesto del Congreso comunicó, que las pérdidas fueron cercanas a los 14.000 millones de dólares por la interrupción de actividades y la caída del consumo.
El conflicto surgió por la financiación de los subsidios sanitarios asociados al Obamacare, una de las principales políticas impulsadas por Barack Obama y ampliadas por Joe Biden. Los republicanos exigían reducir la cobertura, y los demócratas defendían su continuidad para evitar que millones de personas pierdan acceso a la salud.
La Cámara de Representantes aprobó la ley presupuestaria que reabre el gobierno tras 43 días de cierre.
La disputa dejó tensiones entre ambos partidos. El presidente de la Cámara, Mike Johnson, responsabilizó a los demócratas por “bloquear el funcionamiento del país”, mientras que el líder opositor Hakeem Jeffries defendió el acuerdo como “una defensa de los derechos de los ciudadanos”.
Con la reapertura, los 670.000 trabajadores suspendidos volverán a sus puestos a partir del jueves, y el país intentará recuperarse de las pérdidas económicas generadas por la parálisis.
comentar