Jorge Mangeri, el único detenido por ser el principal acusado del crimen de Ángeles Rawson, habló desde la cárcel de Ezeiza y contó que se encuentra bien y recibe un buen trato.
"Estoy bien, gracias. La gente de acá me trata bien. Gracias por preguntar y preocuparse, pero no voy a decir más nada", sostuvo Mangeri en declaraciones a Tiempo Argentino.
A pesar de las declaraciones, fuentes internas del penal le contaron al matutino que los reclusos le advirtieron al portero que la va a pasar "mal".
Por otra parte, Fernando, el portero suplente del edificio de la calle Ravignani 2360, donde vivía Ángeles, contradijo en su declaración ante la Justicia a Mangeri.
El portero detenido, durante su declaración como testigo, había afirmado que tras pedirse licencia médica el pasado lunes 10 –día que en desapareció Ángeles- el martes, miércoles y jueves siguientes había estado trabajando en el edificio contiguo.
Por el contrario, Fernando, el portero al que llamaron para reemplazar a Mangeri, aseguró que nunca vio esos días a su compañero por la zona.