Un testigo que se encontraba a 50 metros de donde se produjo la denominada “Masacre de Monte”, brutal episodio donde cuatro jóvenes fallecieron tras una persecución policial y posterior choque en San Miguel del Monte en mayo del 2019, sostuvo que vio a un policía en posición de tiro con la “intención de rematar” a las víctimas tras el impacto del auto contra el acoplado de un camión y agregó que luego escuchó un disparo de arma de fuego.
"Después del fuerte estruendo del choque, veo bajarse al conductor de un móvil policial en posición de tiro con un arma de fuego en la mano. Pierdo de vista al conductor y escucho una detonación de un arma de fuego”, relató Ignacio Cattaneo, un vecino de la localidad de San Miguel del Monte que declaró durante la cuarta audiencia del juicio por jurados que tiene como imputados al excapitán de la policía bonaerense Rubén Alberto García y a los oficiales Leandro Ecilape, Mariano Ibáñez y Manuel Monreal.
De esta forma, el testigo señaló que los cuatro agentes tuvieron la intención de rematar a los fallecidos Danilo Sansone (13), Gonzalo Domínguez (14), Camila López (13) y Aníbal Suárez (22), y a Rocío Quagliarello (actualmente de 17 años), que quedó herida de gravedad a raíz del choque.
Esta situación se suma al relato del chofer del camión impactado, llamado Héctor Mensi, quien ayer aseguró haber escuchado cuatro disparos antes del choque y dos después, y al informe de autopsia de Gonzalo, del que surgió que el adolescente tenía alojada una bala en uno de sus muslos, aunque fuentes judiciales aclararon que dicho disparo fue recibido durante la persecución policial y no tras la colisión.
El testimonio de Cattaneo se realizó a través de la plataforma Microsoft Teams, debido a que el testigo se encuentra viviendo en España, y comenzó pasadas las 10.30, ante la atenta presencia de los 12 jurados y de la jueza a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 4, Carolina Crispiani, quien modera el debate.
"Me estaba por acostar a dormir, cuando escucho un estruendo muy fuerte. Veo que se debe a un choque sobre la ruta. Mi intención fue salir a ayudar a las posibles víctimas. Cuando salgo a la calle, lo primero que veo es sobre la esquina una nube de polvo y veo frenar un móvil policial que arrastra las ruedas”, comenzó en su relato Ignacio.
A continuación, el testigo manifestó que creía que estaba presenciando un enfrentamiento, ya que vio al conductor de la patrulla descender del vehículo en posición de tiro, por lo que se resguardó. Tras ello, escuchó una detonación.
"No se entendía bien lo que había pasado. Un uniformado, que no se acercaba a la escena, me dice que eran unos chorros que venían desde el barrio Montemar. Veía una montaña de tierra. Cuando veo más en detalle, veo que había dos cuerpos en la calle y una butaca dispersa. Más adelante veo la parte delantera de un vehículo. Ahí me di cuenta que era un coche que se había partido a la mitad”, describió.
Luego, Cattaneo dijo haber visto a “dos chicas heridas” en referencia a Rocío Quagliarello y a Camila López.
"Tenían el pelo largo y rubio, estaban tendidas. Una de ellas, solo una, se podía mover y trataba de reincorporarse levantando su torso, de la cintura para abajo no se movía. Se quejaba del dolor. Trataba de llamar a la amiga que no se movía”, detalló.
En ese contexto, el testigo señaló que "había dos móviles en el lugar", hasta que "llegó un Chevrolet Astra negro". "De ese auto se bajó quien era el subcomisario (Franco) Micucci (actualmente detenido en el marco de la causa y a la espera del juicio oral por el delito de encubrimiento). Después vi llegar ambulancias al lugar. Ambulancieros del hospital sacaron de la parte trasera del coche sacaron a un chico, agarrándolo de los puños de la campera que tenía puesta. Como si fuese un paquete, inerte, inmóvil y lo depositaron en el suelo", agregó.
Un testimonio similar aportó Rodrigo Masías, quien circulaba aquella noche por la calle en la que tuvo lugar el choque entre el Fiat 147 y el acoplado y que se presentó a declarar a pesar de haber tenido un grave accidente "ocurrido en una fecha posterior al 20 de mayo- por el cual perdió la visión.
"Yo esa noche iba en dirección a la casa de mi primo. Nunca llegué. Llegando a la colectora miro en dirección hacia Almirante Brown, vi que venía la policía y adelante un auto. Seguí caminando y siento el silbido de una bala que me pasa de atrás hacia adelante. Automáticamente corro hacia la esquina, escucho un fuerte golpe, pasa una polvareda de tierra y veo medio auto rodando. Agarré el teléfono y grabé", señaló Masías, en compañía de su padre.
Tras ello, el fiscal Mariano Sibuet reprodujo en una pantalla de la sala de audiencias los videos que había capturado Masías. "Son tiros boludo, son tiros", se escucha en el video filmado tras el impacto, en el cual se observa el Fiat 147 partido a la mitad y el cuerpo de dos adolescentes que yacían en el suelo.