Hugo Arredondo, el detenido que este miércoles atentó contra la vida de una fiscal en plena audiencia en la provincia de Mendoza, justificó su accionar argumentando que lo hizo porque "hace cuatro meses que no me dejan ver a su hija" y quería llamar la atención.
Arredondo, de 37 años, cumple condena en el penal de San Felipe, y ayer sacó una faca que llevaba entre su ropa e intentó matar -en medio de un juicio oral llevado a cabo en la sala 25 contra Arredondo y otros dos presos- a la fiscal Claudia Ríos, quien logró evitar que le hiriera en el cuello con una gracias a que se corrió hacia atrás y activó un gas pimienta que llevaba en el bolsillo.
El preso, que lleva varios meses aislado en el pabellón de máxima seguridad del mencionado penal mendocino, tomó del cuello a una estudiante de Derecho que presenciaba el debate y la hirió, aunque no fue de gravedad porque los penitenciarios lograron reducirlo.
De acuerdo con información del diario El Sol, es la madre de la hija del preso quien decidió no llevar a la menor al penal y todo este tiempo evitó el contacto con el padre, por problemas de pareja.
A partir de la conmoción que generó este hecho de inseguridad judicial, está frenada la actividad en el Polo Judicial, el nuevo edificio junto a la Penitenciaria donde se realizan los juicios y trabaja el Ministerio Público Fiscal. La medida de suspender hasta que se garantice la seguridad del personal y funcionarios, lo tomó el gremio de empleados estatales de Mendoza, después de una reunión con jueces y trabajadores judiciales en reclamo de mayor seguridad.
Existe la sospecha de que alguno de los otros reclusos que estaban siendo juzgados junto a él le pasó el arma. De una forma u otra, hubo una falla en los mecanismos de prevención por parte de personal penitenciario.
Arredondo cumple una pena de prisión perpetua por el crimen de Jorge Daniel Montilla, un exmilitar y comerciante de 51 años que fue baleado en marzo de 2015. Junto con una banda de delincuentes, intentaron robarle la camioneta a la víctima, quien recibió cuatro tiros y falleció.
Fue alojado en el penal de Almafuerte, donde en diciembre de 2019 apuñaló a Nicolás Lozano, un compañero de celda. Esa causa la investigó la fiscal ahora atacada. Fue la jueza María Julieta Espínola quien lo sentenció a 14 años de prisión.
Siete penitenciarios de la provincia de Mendoza fueron pasados a disponibilidad por el ataque de un preso a la fiscal Claudia Ríos. Se trata de siete empleados del Servicio Penitenciario provincial, que fueron los responsables del traslado y las requisas realizadas al detenido, Hugo Eduardo Arredondo, que este miércoles atacó a la fiscal con una chuza en una sala del Polo Judicial de Mendoza.
Los investigadores intentan establecer ahora si el preso, Hugo Arredondo, tuvo colaboración del personal penitenciario, y los siete fueron llamados a declarar.
En declaraciones a la prensa, Marcelo Puertas, titular de la Inspección de Seguridad del Polo Judicial, aseguró que "se están identificando a los responsables vinculados al Servicio Penitenciario" y que "no se descarta que pudo haber existido connivencia entre personal de servicio".
En tanto, este jueves por la mañana, los empleados que trabajan en el Polo Judicial de Mendoza se reunieron en la explanada del edificio donde realizaron una asamblea por lo que el cronograma de debates y audiencias en general quedó totalmente suspendido por unas horas.
Los trabajadores decidieron suspender todas las actividades hasta que el ministro de la Suprema Corte de Justicia, José Valerio, se hiciera presente y, tras su llegada y luego de escuchar los planteos, se decidió retomar la actividad judicial aunque en forma restringida.
Arredondo había sido trasladado este miércoles hasta la sala 15 del edificio judicial para comenzar a ser juzgado por un intento de asesinato ocurrido el 5 de julio de 2019 en el penal de Almafuerte. Según la fiscal Ríos, ese día el interno Carlos Enrique Olmedo fue pateado en el piso y apuñalado por otro trío de reclusos entre los que se encontraban Arredondo, Jorge Darío Bracamonte y Lucas Gabriel Garro. Los tres detenidos están imputados en la causa como coautores de tentativa de homicidio simple y, por ese hecho, iba a ser juzgado Arredondo.
Pero antes de ese caso, Arredondo quedó preso en una causa por el crimen de Jorge Daniel Montilla, de 51 años, un ex militar y comerciante que fue baleado el 10 de marzo de 2015, y además del ataque contra Olmedo, Arredondo también fue encontrado culpable de asesinar a Nicolás Lozano, un preso que fue golpeado y apuñalado el 26 de diciembre de 2019. Arredondo también tiene otra investigación abierta en su contra por otro crimen cometido en la cárcel en septiembre del año pasado: el de un interno de 31 años.
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