Una médica y un enfermero contradicen la versión de la familia de Chano

Emily Cespedes es médica y volvió a declarar ante Martín Zocca, fiscal de Zárate. Señaló que esa madrugada, al llegar a la casa de "Chano", el psiquiatra, quien había arribado antes, le dijo que el músico pasaba por un cuadro de brote psicótico y le ordenó que preparara medicación para bajarle la ansiedad.

Incluso, el enfermero Juan Marcelo Gutiérrez, compañero de Cespedes y quien declaró como testigo nuevamente este martes, recordó que “la idea era entrar, que los policías lo reduzcan y aplicarle la medicación para poder llevarlo a la clínica, pero estaba con una cuchilla en todo momento, era imposible hablar con él. Era lo que nos comentaba el psiquiatra”.

La médica Cespedes recordó ver que Chano tenía una cuchilla de treinta centímetros en su mano, la cual mantenía en alto y en dirección hacia abajo. “Los voy a matar, les voy a cortar la yugular”, recordó que le gritaba a los policías que estaban ahí.

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Tanto ella como el enfermero sostuvieron que Chano estaba violento incluso luego de recibir el disparo, secuencia que sólo escucharon. Ambos dijeron por separado que Chano, mientras estaba en el piso con el disparo en su abdomen, le tiraba manotazos cuando lo querían poner en una camilla para trasladarlo.

Incluso, durante el traslado al Otamendi, tuvieron que mover a la mamá de Chano junto al conductor porque el músico la agredía verbalmente y hasta forcejeó cuando estaba en la caja.

Mientras, queda pendiente la realización de una pericia balística en la causa que se ve demorada porque uno de los peritos contrajo Covid-19.