El fiscal federal Carlos Rívolo pidió este lunes enviar a juicio oral a los detenidos Fernando Sabag Montiel, Brenda Uliarte y Gabriel Nicolás Carrizo en la causa por el intento de asesinato de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, el 1 de septiembre pasado.
Rívolo consideró completa la investigación en relación a los detenidos por el hecho, pero requirió que la causa siga con medidas de prueba destinadas a "comprobar la existencia de otros posibles partícipes y/o autores intelectuales", según el escrito de 197 carillas.
La fiscalía pidió a la jueza del caso, María Eugenia Capuchetti, que dé por cerrada la parte de la investigación vinculada al autor material del disparo, Sabag Montiel, a su novia -ambos como coautores- y al llamado "líder" de la denominada banda de los "copitos", Carrizo, este último como "partícipe secundario".
La magistrada deberá ahora dar vista a las defensas de los tres detenidos y luego resolver si da por cerrada la investigación y la envía a sorteo de Tribunal Oral.
La querella de la Vicepresidenta ya manifestó su oposición a que la causa sea juzgada de manera parcial y reclamó que antes concluyan medidas de prueba en torno a diferentes pistas de la investigación, entre ellas la que involucra a Gerardo Milman.
Sin embargo, los abogados de la Vicepresidenta, José Manuel Ubeira y Marcos Aldazábal, aclararon que "subsidiariamente, para el caso de que se considere concluida la investigación respecto de Carrizo, Sabag Montiel y Uliarte a pesar de la oposición de esta parte, haremos ejercicio de nuestro derecho a acusar, con el fin de mantenerlo para la instancia oral".
En el requerimiento de elevación a juicio presentado este lunes, la fiscalía entendió que la conducta de los tres acusados fue "premeditada" e idearon "un plan para llevar a cabo el asesinato de la Vicepresidenta de la Nación".
"Al respecto, corresponde indicar que, más allá de la indudable conmoción política que generó el intento de asesinato de una Vicepresidenta de la Nación, hecho de enorme gravedad institucional, de todos los teléfonos secuestrados y analizados no surgió vínculo alguno de los nombrados con ninguna agrupación o persona que a esta altura permitiera siquiera sospechar sobre la posibilidad de que se les hubiese brindado asistencia para el suceso", analizó.
Rívolo destacó que "tampoco se han hallado elementos relevantes en los entrecruzamientos telefónicos, ni en la geolocalización de los dispositivos" ni en los "movimientos financieros" que apunten a la colaboración de terceros con dinero para el atentado.
El fiscal dio por cerrada la investigación en relación a los tres detenidos pero advirtió que " teniendo en cuenta que aún restan medidas que producirse en relación con algunas de las hipótesis introducidas en autos orientadas a comprobar la existencia de otros posibles partícipes y/o autores intelectuales de la maniobra investigada, es que consideramos que corresponde que V.S. ordene la extracción de testimonios para continuar avanzando en la investigación de aquéllos supuestos".