Sorpresa y media. Por la mañana fuentes cercanas al ministro de Economía, Sergio Massa, informaron que él mismo había designado a Gabriel Rubinstein al frente de la Secretaría de Programación Económica -en los hechos ocuparía el rol de viceministro-, pero a la hora del nombramiento oficial nada ocurrió.
Por un lado trascendió que el nombramiento se iba a demorar hasta el martes y por otro que finalmente Rubinstein no iba a ocupar ese cargo. ¿Cuáles fueron los motivos que hicieron que se produzca un cambio de esta naturaleza?
Aparentemente no gustaron en el seno del gobierno, críticas expresadas por Rubinstein a la vicepresidenta años atrás expresadas en sus redes sociales. Y desde sector del Frente de Todos habrían pedido que no se haga cargo de las funciones para las que iba a ser designado.
Rubinstein es un economista de vasta trayectoria que se desempeñaba actualmente como director ejecutivo de GRA, una consultora en economía y finanzas.
En el sector público fue representante del Banco Central de la República Argentina durante la gestión de Roberto Lavagna, entre 2002 y 2005.
En aquel período se destacó por formar parte del grupo negociador de los acuerdos con el Fondo Monetario Internacional (FMI), y renegociación de la Deuda Pública.
En el ámbito privado fue director ejecutivo de DCR-Fitch Rating Agency, director ejecutivo de la Bolsa de Comercio Buenos Aires y coordinador General de Estudio Broda.
En una de sus recientes definiciones a través de la red social Twitter expresó que lo urgente e importante en la Argentina es terminar con el desequilibrio fiscal, mejorar la credibilidad interna y externa (desde lo político) para fortalecer reservas y mantener un endeudamiento responsable.
"Bajo estas condiciones, la inflación podría comenzar a estabilizarse en niveles razonables. Caso contrario, el riesgo hiperinflacionario seguirá tocando la puerta, y cada vez más fuerte", indicó Rubinstein.
Pese a su buena relación con el titular del Banco Central, Miguel Pesce, fuentes consultadas afirman que Rubinstein suele ser el economista más crítico en el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) que mensualmente realiza la autoridad monetaria, entre los 50 analistas que participan del muestreo.
Ahora habrá que esperar lo que pasa en los próximos días para ver qué será de su destino. Pero todo parece indicar que no ocupará el cargo.
comentar