La fiscal, una camarista y el juego de las suspicacias

Pese que se discute una acreencia de la polémica concesión del padre del actual Presidente, en Balcarce 50 rechazan que exista un conflicto de intereses y aducen que se vieron obligados a negociar una vieja deuda que “iba camino a evaporarse al ser licuada por la inflación” por el paso del tiempo.

La semana pasada se conoció la resolución de la fiscal ante la Cámara de Apelaciones Gabriela Boquín, que rechazó el entendimiento por considerarlo “abusivo” y que de alguna manera “condonaba” la acreencia que mantenía el grupo Macri con el estado federal.

En el oficialismo rechazaron los cálculos efectuados por la fiscal general -cuyo dictamen ahora será validado o no por la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Comercial- y centraron la defensa en que lo que se debe son poco más de $600 millones y que como la ex concesionaria está en concurso preventivo no se aplican intereses y ese monto se va perdiendo con los años por efecto de la inflación.

Lo cierto es que ayer voceros oficiales sindicaban que Boquín tiene estrecha relación con quien fuera titular de la Inspección General de Justicia (IGJ) durante el comienzo del kirchnerismo, Ricardo Nissen, ya que la funcionaria judicial estuvo contratada como asesora en ese organismo entre octubre de 2003 y noviembre de 2005 justamente el mismo período en que Nissen estuvo al frente de la institución.

Aunque la fiscal no pertenece a la agrupación Justicia Legítima, los datos filtrados desde usinas oficialistas sugieren que igualmente sería influenciada por el FpV y aseguran que su resolución “está direccionada” para causar daño al gobierno.

En este marco, ayer se conoció que una de la integrantes de la sala B de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Comercial, Ana Isabel Piaggi, es la mujer del constitucionalista radical y ex diputado por el PRO Jorge Vanossi (actual parlamentario del Mercosur por el massismo). Lo cierto es que desde algunos sectores señalan que habría un conflicto de interés y debería “excusarse” de dictaminar en este tema.

La misma sala ya falló a favor del grupo Macri en 2003 en un diferendo por el Correo Argentino SA. Ahora algunas versiones señalan que la magistrada podría apartarse cuando deba intervenir en el tema.

“No debería excusarse porque no hay relación directa con Macri sino a través de su esposo, en todo caso. ¿Qué hubiera hecho por entonces Eugenio Zaffaroni en la Corte Suprema cuando previamente había sido diputado e interventor del INADI?”, contó una fuente del radicalismo consultada.

En diálogo con este diario, el dirigente radical porteño admitió que el conflicto emanado por el Correo “podría haberse tratado de forma diferente, quizás, convocando a una mesa de especialistas en quiebra o dándole otra envergadura institucional para evitar el cuestionamiento ético por tratarse de una empresa perteneciente a familiares del Presidente. Pero igual hubiesen cuestionado al gobierno porque demorar el trámite significaba un beneficio para el deudor porque se licuaba la deuda con el Estado”.

En este contexto, la fuente concluyó que “de cualquier modo iba a haber cuestionamientos. En todo caso, el gobierno debe asumir que cuando estás en la gestión siempre podés recibir críticas al contrario que cuando estás en la oposición”.

Ayer, en declaraciones radiales, el senador radical Julio Cobos admitió que ‘el conflicto de intereses está en el parentesco que tiene el presidente con el ex titular del Correo (Franco Macri)’.