El Viaducto despachó a su rival, se consolida en la segunda parte del torneo y sueña con seguir en la Primera Nacional.
Después de una primera vuelta que estuvo lejos de lo esperado, Arsenal mejoró en el inicio de la segunda parte de la temporada en la Primera Nacional y al ganarle por un ajustado y emotivo 2 a 1 a Racing de Córdoba sumó su tercer triunfo en los últimos seis encuentros para soñar en grande con la permanencia en la divisional.
El Celeste y Rojo se puso en ventaja por medio del gol en contra de Esteban Calderón, que descolocó a su arquero y pasó la pelota entre las piernas, pero la alegría duró poco, ya que la Academia llegó a la igualdad a través de Tomás Castro Ponce. Sin embargo, en el inicio del complemento el local volvió a celebrar por un gol de Nazareno Roselli, el defensor central que se elevó ante todos en el área rival para dejar atrás las derrotas contra Colegiales y Atlanta y recomponer la imagen en un presente un poco más alentador que en los meses previos.
Después el local se tiró unos metros atrás en el terreno de juego, aguantó el marcador en el tramo final y jugó con la desesperación de un contrincante que ganó uno de los últimos diez partidos que disputó y que continúa fuera de los puestos de Reducido de la Zona A.
De esta manera, Arse rompió con la mala racha que arrastraba en Sarandí porque sumó tres puntos por primera vez como local y regresó al triunfo luego de 259 días, ya que no lo hacía desde la mínima diferencia concretada ante Alvarado de Mar del Plata por la última fecha de la temporada pasada.
Los números indican que el Viaducto ostenta 18 unidades, en zona de descenso, espacio que comparte con Alvarado, que suma 20, mientras que el último en salvarse hasta el momento es All Boys, con 23 puntos.
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