En esta etapa, el Municipio de Lomas de Zamora y la Provincia construyen un nuevo sistema de drenaje hidráulico para solucionar el problema de las filtraciones, para luego reparar muros y reemplazar la calzada.
A paso firme, aunque no tan rápido como desearían los vecinos, avanza la reconstrucción del paso bajo nivel Manuel Belgrano de Temperley, que une las avenidas 9 de julio y Eva Perón bajo las vías de la Línea General Roca (LGR), que llevan adelante la Provincia y el Municipio de Lomas de Zamora.
Las acciones se enmarcan en el plan integral de puesta en valor de la Ruta Provincial 49 e implica, en esta primera etapa, la construcción de un nuevo sistema de drenaje hidráulico para solucionar la actual problemática de las filtraciones de agua que provoca la rotura del pavimento.
Una vez finalizados los trabajos, se llevará adelante la reparación de los muros del paso bajo nivel y la reconstrucción de la calzada en material de hormigón para mejorar la circulación vehicular y garantizar una mayor durabilidad del asfalto para el tránsito pesado.
A causa de las obras, que mantienen reducida la circulación a un carril en cada sentido, el Municipio recomienda optar por tomar vías alternativas y así evitar demoras en la circulación vehicular. Los cruces más cercanos son los pasos a nivel de Cerrito-Garibaldi y Fonrouge-Boedo, como también los pasos bajo nivel de Loria-Ayacucho, Lamadrid-Sáenz, y Matheu-Pereyra Lucena.
Cabe recordar que la repavimentación y puesta en valor de la traza de la Ruta 49 -avenida Eva Perón (ex Pasco)- que incluía la obra del bajo nivel, fue licitada hace tres años exactamente, e implicaban, en su momento, una inversión de 1.575 millones de pesos.
Así, se busca recuperar la traza que conecta a los partidos de Lomas y Quilmes, desde su origen en avenida Hipólito Yrigoyen, en el partido de Lomas de Zamora, hasta su finalización en Camino General Belgrano, Quilmes, lo que incluirá darle una solución definitiva al paso bajo nivel de Temperley, tristemente conocido por sus "cataratas" o inundaciones a tope.
Según el pliego, el plazo de ejecución total es de 365 días, en el que se deberían reparar los 9,773 kilómetros de esa ruta, que se realizaría por tramos: El primero, entre avenida Hipólito Yrigoyen y Brandsen, en Temperley; luego, con el bajo nivel de Temperley; el tercero, desde Correa hasta Boston Ravel; y el último, hasta el Camino General Belgrano.
En el apartado de la memoria descriptiva del pliego de licitación dedicado al paso bajo nivel de Temperley, se señaló que el mismo "presenta un gran deterioro producto principalmente por el paso del tiempo y la presencia de la napa freática que ejerce presión hidrostática sobre muros, pavimentos y en la estructura en general; lo que ocasiona una gran cantidad de filtraciones y fisuras".
Allí se describió que en ese sector se reemplazará todo el pavimento, conservando las dos calzada de 7 metros cada una con un separador central de 70 centímetros. La obra consistirá en la colocación de una membrana impermeable, un "manto drenante" para evacuar el agua, una losa de subpresión -de 25 centímetros de espesor- y un pavimento de hormigón de 12 centímetros de espesor. Y se construirá una canaleta lateral que conducirá el agua hacia los sumideros.
Además, que se hará a nuevo la estación de bombeo, para lo cual se prevé una limpieza profunda del sistema, y se instalarán equipos más potentes, con lo que esperan subsanar las recurrentes inundaciones que se producen.
En lo que respecta a la estructura del puente, se prevé la inyección en las fisuras que presentan los muros, a fin de evitar la circulación de agua por dentro de la estructura; y construir una grilla de pilotes cada 4,30 metros para ayudar a soportar la subpresión producida por la carga hidrostática.