Trabajo conjunto por parte del Municipio del área de Zoonosis y las secretarías de Salud y Seguridad, agentes policiales y la entidad Caballos Quilmes.
En medio de la lucha contra el maltrato animal, el Municipio de Quilmes informó que en el último año se rescataron más de 70 caballos que eran utilizados para tirar carros, en tanto que dichas acciones fueron llevadas a cabo en conjunto con agentes policiales, el área de Zoonosis, secretarías de Salud y Seguridad y con una entidad proteccionista del distrito, mientras que los casos más resonantes del último tiempo al respecto con la problemática ocurrieron en el barrio de La Ribera.
La ley que protege a los animales contra todo tipo de violencia cobró muchísimo protagonismo y tanto las autoridades judiciales como las municipales le dieron un tipo de relevancia mayor en la agenda, a raíz de las constantes denuncias por parte de los vecinos y los escraches públicos, siempre fundamentados. Lo cierto es que la tracción a sangre estuvo en discusión y se implementaron medidas para resolver la problemática, aunque muchos carritos siguen utilizándolos para trasladarse. Es por eso que se atacó más que nunca y los exitosos resultados fueron publicados en el boletín municipal.
En esta oportunidad, según los registros oficiales, se informó que 70 caballos fueron rescatados teniendo en cuenta como parámetro principios de mayo de 2023 hasta inicios del mismo mes de este año. El trabajo se realizó en conjunto con la Organización No Gubernamental (ONG) Caballos Quilmes, que no solo rescata sino que los traslada a hospitales veterinarios y les otorgan una recuperación beneficiosa, además de la intervención de los agentes de la Justicia y las Secretarías de Seguridad y de Salud, a través de la Subsecretaría de Zoonosis y Protección Animal.
“A partir de la Ordenanza Municipal 11.840/12, que prohíbe la tracción a sangre equina, en articulación con la Ley Nacional Penal 14.346, que está por encima de cualquier otra normativa vigente en la materia, desde el Municipio de Quilmes no se va a permitir ni justificar el sufrimiento de ningún animal”, indicaron en un comunicado oficial.
Los casos más resonantes tuvieron lugar en el barrio de La Ribera y en el lado oeste quilmeño. De hecho, uno de los últimos mostró extrema violencia por parte de unos adolescentes, que no solo lo utilizaban para trabajar, sino que lo tenían desnutrido, con cortes en el lomo y órganos dañados a raíz de penetración con botellas.
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