Al delantero Alex Silva Garrel se lo pudo ver muy poco en Quilmes a causa de una lesión. Ahora, con un año más de contrato, es uno de los que sumará experiencia a un plantel que cuenta con mayoría de juveniles y que necesitará del temple de los más grandes para los momentos más duros.
El delantero aspira a quedarse para recorrer un camino pleno y sin sobresaltos, así que en diálogo con FMQ hizo referencia a sus primeros días de esta nueva pretemporada: “Tengo un poco de ansiedad por volver a jugar, el tramo final del certamen anterior fue complicado por mi lesión, sentía impotencia por no poder ayudar al equipo en momentos duros. Me volví a resentir de la lesión y persistió un poco la bronca por apurarme para el partido con Morón. Fueron instantes difíciles de los que pudimos salir adelante”.
El oriental de 27 años había llegado a comienzos de febrero para sumarse a las huestes Cerveceras, pero sus participaciones escasas por lesiones no le permitieron mostrarse a lo grande, con lo cual espera que la racha cambie: “Uno siempre quiere jugar, son cosas del fútbol el hecho de lesionarse y además ajenas al jugador, que no tiene la culpa de la dolencia. Sucede y no hay más que hacer que recuperarse, más en fechas decisivas. En cuanto a mi, estoy muy adaptado al equipo, fui tomando confianza a medida que fui jugando algunos partidos hasta que me lesioné”.
Y añadió: “Quiero aportar desde donde me toque. Yo tengo contrato con el club y mi idea es continuar, pero veremos qué pasa estos días, porque muchos se fueron y se renovó el cuerpo técnico. Hablé antes de irme a mi país de vacaciones, me junté con la directiva y les dije que me quería quedar, que tenía sed de revancha. Sé que todo está sujeto al nuevo entrenador y lo estamos conociendo, así que todavía es temprano para decir si me quedo o me voy. Mi prioridad es seguir, pero iremos hablando con el DT”.