Tres alumnos y una portera de la Escuela Secundaria N° 51, de Quilmes Oeste, resultaron intoxicados luego de que un estudiante arrojara gas pimienta dentro de un aula, motivo por el cual debieron recibir asistencia médica en el Dispensario de Quilmes, a donde fueron trasladados con síntomas de mareo y vómitos.
Una broma de mal gusto convulsionó ayer por la mañana la jornada de clases, en el establecimiento educativo ubicado en las calles Aimé Tschiffely y Beruti. Un integrante del cuerpo docente relató a DIARIO POPULAR que un joven arrojó la sustancia tóxica dentro de un aula colmada de alumnos y con las ventanas cerradas.
La reacción fue inmediata, gran parte de los menores comenzó a sentir ardor en los ojos y picazón en la garganta. La peor parte se la llevaron tres chicos que se encontraban a corta distancia del lugar en el cual fue esparcido el gas pimienta.“Se sacó a todo el alumnado del aula y se abrieron las ventanas para ventilar”, explicó una auxiliar docente, quien confirmó que, luego del incidente, “una portera se tuvo que retirar de la escuela” porque “sentía el pecho cerrado y se tuvo que ir al médico”.
Asimismo, la trabajadora de la Secundaria 51 explicó que tres alumnos debieron recibir asistencia médica en el Dispensario Municipal de Quilmes, al tiempo que indicó que el joven que arrojó el gas pimienta “está identificado” y el cuerpo directivo ya “tomó medidas”, aunque no aclaró si sería expulsado por su desaprensiva actitud.
El caso más grave fue el de uno de los chicos, que llegó derivado por el SAME al centro de salud con vómitos y mareos. Por otra parte, desde la escuela intentaron restarle importancia al episodio, al afirmar que “no pasó nada grave”.