El Gasolero llegó a compensar las bajas que sufrió y trajo jugadores jóvenes para puestos donde necesita un recambio.
Queda una práctica previa al encuentro con Brown de Adrogué y en Temperley ya está todo listo: el Gasolero abrochó los cuatro refuerzos del mercado de invierno y ya piensa en lo que será la segunda rueda con plantel completo. Mientras que la salida de Juan Imbert estaría casi caída, en las últimas horas firmaron Franco Ayunta, quien fue volvió de San Telmo luego de que la dirigencia ejecutara la cláusula de re pesca; Emiliano Saliadarre, a préstamo desde Racing; y Julián Carrasco, proveniente de las inferiores de Boca.
Augusto Aguirre debutó con tres prácticas ante Quilmes y no desentonó. En Turdera están esperando que todos tengan un debut similar, para que el buen momento del Celeste empuje para arriba el rendimiento de los que recién se suman.
En el caso de Saliadarre, pertenece a la Academia y estaba a préstamo en Independiente Rivadavia de Mendoza, donde no tuvo la continuidad que tanto el futbolista como la dirigencia del club de Avellaneda pretendían. Llegó sin cargo y sin opción de compra por lo que dure esta temporada. En diciembre, ambas entidades tendrán que sentarse a negociar nuevamente. Es un centro atacante con características mixtas, más parecido a Facundo Krüger, que a Luis López.
Por su parte, Carrasco rescindió su vínculo con Atlético Tucumán, donde tenía opción de compra 2 millones de dólares por el 50 por ciento del pase, y acordó su nuevo vínculo hasta diciembre 2025. Es extremo y puede jugar como enganche. En los planes del cuerpo técnico de Walter Perazzo, es el reemplazo natural de Brian Sánchez.
Y, finalmente volvió a su casa Ayunta. El atacante centro tuvo un paso de seis meses por San Telmo, donde tuvo un buen funcionamiento, con dos goles y dos asistencias. Para el cuerpo técnico es la alternativa al Animal.