"Hay invitados que pueden gastar hasta 5.000 pesos. Una pastilla de metanfetamina puede costar 1.500 pesos. Por eso, tienen un colchón de dinero impresionante para comprar silencio. Conozco casos, que llegan a la asociación, de vecinos de las quintas que denunciaron estas actividades, sin embargo las fiestas se siguen haciendo. Ni siquiera se atienden los pedidos por ruidos molestos", dijo Izaguirre.
En una de estas fiestas, una joven falleció en la madrugada de este viernes en las afueras de La Plata, al caerse a una pileta y ahogarse. El juez de garantías de La Plata César Melazo, a cargo de la causa, realizó furibundas críticas a los organizadores, pero también a los organismos de control, incluso comentando que el evento siguió llevándose a cabo a pesar de la clausura tras el pago de coimas, con consumo de drogas y una zona VIP para "sexo libre".
"Esta muerte de esa joven debe provocar el escarmiento a los coimeros imbéciles que nada hicieron: Policía Municipal y Control Urbano", escribió en Twitter.
Asimismo, Melazo publicó: "Es increíble. El delegado municipal vive enfrente de donde murió la piba", agregando que el funcionario fue quien "autorizó truchamente que siga la joda". "El dueño capitalista de la quinta es uno de los responsables por la muerte, como también de los menores y mayores drogados".
"El que arregló para coimas para dejar funcionar la droga en los boliches es un funcionario municipal pariente de un juez", señaló Melazo, y fustigó: "se había advertido a la municipalidad y tienen una muerta, háganse cargo". Finalmente, Melazo dijo que "es imperdonable, había precintos en un VIP con sexo libre, por eso quiero justicia, ya que hay una joven muerta, me cago en la coima".
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