En los últimos años fue reconocido como el ladero inseparable de Alfio Basile, pero su carrera en el fútbol fue mucho más. A los 72 años falleció Rubén Díaz, pero en el mundo de la redonda pocos le decían por su primer nombre. Para todos siempre será "El Panadero".
Antes de ser ayudante de campo, Díaz tuvo una larga carrera como defensor que incluyó tres clubes: Racing, San Lorenzo y Atlético de Madrid. En el conjunto de Avellaneda, el Panadero alcanzó los títulos más importantes de su trayectoria en el país. Fue parte fundamental del famoso "Equipo de José" que era comandado por Juan José Pizzuti, el entrenador que lo puso en primera.
Debutó con 19 años en un partido frente a Huracán el 14 de noviembre de 1965. Dos años más tarde, ese equipo de Racing se quedaría con la máxima gloria para el fútbol sudamericano. Tras quedarse con el título local, se quedó con la Copa Libertadores y, luego, la Intercontinental en ese mítico partido ante el Celtic que se cerró con una bomba del Chango Cárdenas.
Luego, el Toto Lorenzo confió en él y se lo llevó al Atlético de Madrid. En el conjunto español estuvo cuatro años que le alcanzaron para quedarse con la Liga Española, la Copa del Rey y, finalmente, con la Copa Intercontinental en 1974 aunque no jugó en ninguno de los dos partidos ante Independiente.
Tras retirarse se convirtió en la mano derecha de Alfio Basile. Como pareja del director técnico, alcanzó once títulos. El primero de ellos fue, una vez más, con su querido Racing. En 1988 se quedó con la Supercopa y, en ese momento, rompió una racha de 21 años sin ningún título para la Academia.
Después de su paso por Racing, se sumó al cuerpo técnico de la Selección Argentina. Allí obtuvo las Copas Américas 1991 y 1993 que, justamente, fueron los últimos títulos del conjunto nacional. También estuvo en el Mundial de Estados Unidos y, aunque en un momento lo quisieron nombrar como culpable del doping de Diego Maradona, finalmente su nombre quedó limpio.
La última etapa de su carrera lo vio como entrenador de Boca y en el club xeneize logró múltiples torneos al quedarse con la Copa Sudamericana y la Recopa en dos oportunidades. Esas buenas actuaciones en el banco hicieron que la dupla retorne a la Selección aunque sin grandes resultados.
A lo largo de su carrera, el "Panadero" consiguió resultados, renombre y, desde ya, ser recordado como un ladero fiel de uno de los técnicos más exitosos de los últimos cuarenta años.
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