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El alemán Mick Schumacher sufrió un fuerte accidente en el Gran Premio de Mónaco de F1 al chocar contra las defensas y partir al medio el auto. Salió ileso.
El Gran Premio de Mónaco de Fórmula 1 vivió una jornada trágica. No solo por las lluvias que retrasaron el comienzo de la carrera y perjudicaron la pista, sino por el impactante choque del que fue protagonista Mick Schumacher.
El alemán colosionó su Haas contra las defensas del circuito de Montecarlo y partió el auto en dos, desprendiendo su eje trasero. La imagen dejó atónito al público, aunque luego el piloto salió por sus propios medios y resultó ileso del accidente.
El percance se produjo en la vuelta 27 de la competición. Schumacher, que venía teniendo una buena actuación, perdió el control del vehículo, hizo dos giros e impactó contra las defensas Tecpro, lo que ocasionó que el choche se partiera al medio.
Luego de lo ocurrido, el hijo del heptacampeón de Fórmula 1 explicó que se abrió demasiado, probablemente "unos 10 centímetros al final" y eso fue lo que generó la pérdida del "agarre".
"Me siento bien, pero muy molesto. En términos de ritmo, definitivamente estuvimos allí y sólo es cuestión de mantener el rumbo; desafortunadamente, no pude hacerlo. El ritmo se sentía fuerte y parecía que podíamos atacar y empujar", detalló el alemán.
Y finalizó: "Desafortunadamente, me abrí un poco demasiado, probablemente unos 10 centímetros al final, y eso fue suficiente para perder todo el agarre que pensaba que tenía y el resultado es lo que sucedió”.
Cabe recordar que Mick Schumacher había protagonizado otra tragedia en el Gran Premio de Arabia Saudita, donde durante la Q2, chocó contra uno de los muros.
