Si nos dedicamos a la agricultura invertir en maquinaria es clave. El implemento de la maquinaria agrícola adecuada nos permite optimizar los recursos humanos y económicos. Al fin y al cabo, colabora con el incremento de la producción, el objetivo a alcanzar para aumentar nuestras ganancias. Pero como se trata de un gasto importante, debemos evaluar algunas cuestiones básicas antes de hacerlo.
Existen algunas características técnicas a las que tenemos que prestarle atención antes de incorporar maquinaria a nuestra flota. Siempre teniendo en cuenta la envergadura de nuestro campo y la magnitud del negocio que manejamos.
Pero de comprar las sembradoras usadas correctas puede depender un buen o mal resultado. De nuestra elección pende el objetivo que pretendemos alcanzar adquiriéndolas.
Para incorporar este tipo de maquinaria sin gastarnos todo el dinero que tenemos lo recomendable es comprar sembradoras usadas. Y por su carácter de usadas lo primero que tenemos que evaluar es el estado en el que se encuentran. En segundo lugar, debemos elegir las que se adapten a nuestra siembra y al tipo de suelo, ya que varían en función de ella.
El mercado ofrece distintas Cestari Tolvas en función de la sustancia o materia que van a contener. Lo mismo ocurre con las sembradoras. Existen diferentes tipos según el tamaño del grano para el que serán empleadas.
Para los granos más finos se utilizan las que son al voleo o a chorrillo. Para la siembra de granos gruesos se utilizan las sembradoras de precisión.
También hay diversas alternativas en función del tipo de suelo sembrado. Si el terreno es duro las sembradoras deben contar con un chasis igualmente robusto. Porque es la carrocería la parte de la máquina que soporta todo el peso.
Además, hay que prestarle atención al tren de siembra. Es decir, a las ruedas, abre y tapa surcos y cuchillas que lo conforman. Ni más ni menos, es la parte de la sembradora que hace contacto con el suelo.
Lo más importante a la hora de incorporar Cestari Tolvas a nuestra maquinaria agrícola es la capacidad y el proceso de descarga. Porque van a albergar nuestros fertilizantes y semillas y porque necesitamos que éstos sean dispuestos sin inconvenientes.
Debemos pensar en la autonomía que necesitamos y pretendemos. Pero lo ideal es que tengan la capacidad suficiente para resolver una jornada entera de siembra.
Durante los últimos años, la industria de la maquinaria agrícola aumentó la capacidad de las tolvas.
Las sembradoras de 24 hileras dotadas con tolvas de 6 mil litros de capacidad es uno de los modelos más vendidos hoy por hoy. Pero de igual modo en el mercado existen maquinarias para cada necesidad. Sólo tenemos que determinar cuál es la más adecuada para nuestra siembra.
En todos los casos, pero sobre todo si compramos tolvas usadas, es importante cerciorarnos de que su sistema de dosificación no esté obstruido. Tanto las semillas como los fertilizantes tienen que poder fluir sin ningún impedimento. En relación al material de confección, debe ser el adecuado según lo que va a contener la tolva. A diferencia de las tolvas empleadas en la industria de la construcción, no hace falta que sean ultrarresistente para albergar y dosificar granos.
Para que nuestra maquinaria agrícola cumpla con la vida útil esperada es necesario que le brindemos el mantenimiento adecuado. Al finalizar la estación de siembra, debemos asegurarnos de que no queden semillas ni restos de fertilizantes en las tolvas. Estos últimos son corrosivos y pueden dañar el contenedor.
La limpieza correcta debe incluir el lavado de los caños de bajada con cierta presión de agua. Dejarlos secar al aire libre y con las tolvas abiertas. Una vez que todo está seco, se recomienda guardar la sembradora untada con una fina película de cera.
Para evitar que quede humedad y se tapen las bocas de descarga, no se aconseja lavar la maquinaria durante la época de siembra. Cuando se obstruye la salida se recomienda desconectar el caño de goma y destaparlo con una varilla o alambre fino.
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