Javier Bardem: "Jamás supe si una película iba a ser buena o mala"

-Bueno, “The Last Face” (2016) fue nombrada como una de las peores películas que se haya filmado en la historia del cine, y tiene un buen titulo y estoy orgulloso de haberla hecho. (risas). Y no fue fácil hacerla (risas). Escúcheme, he estado haciendo este trabajo desde hace 25 años. Y jamás supe en un segundo si la película que estaba haciendo iba a ser buena o mala. Usted intenta hacer lo mejor. Y le puedo decir, con toda seguridad, que todos los que estaban envueltos en esa película, trabajaron hasta lo increíble. Así que desde Sean Penn (el director) hasta el ultimo miembro del equipo, trabajamos por muchas horas, en diferentes locaciones con calor sofocante y con el frío congelador del desierto, y si no sale bien el trabajo, bueno, por lo menos lo intentamos.

-Usted tiene dos descendientes cuya madre fue su esposa Penélope Cruz, el mayor es Leo que tiene 6 años y la menor, que tiene 4 años se llama Luna. ¿Alguna vez estuvieron en el set viéndolo filmar?

-En esta película no estuvieron (risas). Puede imaginarlo. Pero si, un día cuando estaba con vida en la película y quería que vieran a su papá viéndome buen mozo (risas). Otra vez, en especial para mi hijo, que me viera en el bote pirata con cañones, ya que el bote era real y de gran medida. Pero vio una sola toma.

-¿Planea hacer una película para niños?

-Me gustaría hacerla. Me encanta hacer películas. Soy un gran fanático de los filmes para niños. Así que miro muchas de esas películas con mis hijos. Me encantan las producciones de Disney/Pixar, son muy buenas. Creo que “Up” (2009) es una pieza maestra. Me gustó mucho y me encantaría hacer un film para niños.

Ya que interpreta a un capitán, ¿podría capitanear un barco real?

-Nací en las islas Canarias. Pero cuando yo tenía un año de edad, mis padres se fueron a vivir a Madrid y allí no hay mar. O sea que no soy un tipo de mar. Pero no me mareo y doy gracias a Dios, porque sé lo malo que es. Pero lo divertido de este film fue que yo no estuve ni un día filmando en el mar. Todo se hizo en el estudio (risas).

¿En qué forma?

-Una buena cantidad y muy bien calificada de efectos especiales. Es una locura. Pero usted nunca podrá decir que yo no estaba en el mar. No es verdad, ya que permanecí en el mar en una escena, cuando desembarcábamos en la playa. Todo el resto fue filmado en el estudio.

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¿Qué desafíos enfrentó al filmar esta película?

-Creo que el mayor desafío fue como trabajar rodeado de un mundo artificial de efectos especiales, donde las cosas no están allí para tocarlas o interactuar con ellas. Ese fue el desafío, que fue la primera película que hice con efectos especiales. Como le dije, estaba en un bote, un bote real, pero no había un mar (risas). Así que parecía que faltaba algo. Que le digan, mire ahora a la izquierda donde se aparece esa increíble barca y allí hay una gran explosión y el director ordena “acción!” (risas). Y “hágalo en un minuto!” (risas). Me sentí como si fuera un chico de 5 años de edad, como cuando le ordenan que haga algo para sus invitados. Y para mis invitados (risas), no, no quiero hacer nada. Me tomo un tiempo perder mi pundonor.

¿Qué hizo, entonces?

-Cuando perdí mi vergüenza, lo encontré todo bien, porque todo lo tenía que hacer con mi imaginación y para el actor lo mejor es imaginar cosas. Luego cuando vimos el resultado final con los otros actores quedamos sorprendidos por la realidad y lo bien hecho que se veía en la pantalla.

Tengo curiosidad por otro film que aún no estrenó Escobar.

-La terminamos de filmar en diciembre, y he estado tratando de interpretar a Escobar desde el 2000, porque me ofrecieron en ese tiempo hacer “Killing Pablo”. Yo no sabía mucho respecto a Escobar y comencé a leer cosas sobre él, y me obsesioné. Recibi incontables ofertas que usted no puede imaginar, pero me rehusé a todas.

¿Por qué?

-Porque sentí que todas esas ofertas eran sólo de personajes de una dimensión. Y Pablo Escobar era de más de un carácter, no era unidimensional ¿Por qué es reverenciado hasta el día de hoy por mucha gente de Colombia? Y, por supuesto también odiado. Y usted tiene que brindar esos dos colores que él tenía. Hubo muchas otras películas, pero tenía que relatar la historia que yo quería contar y su relación entre él y su amante Virginia Vallejo, la periodista colombiana y que ella misma, de alguna forma, creó al Escobar como nosotros lo conocemos. Es algo más del perfil humano de ambos. Y humano no significa humanizarlo de ninguna forma. Él es humano en el sentido que no se refiere a las consecuencias que había creado, pero es más respecto a todas esas cosas de donde se originaban, de dónde provenía toda esa codicia, poder, necesidad, ambición y maldad. Tengo la esperanza que sea interesante. Tengo la esperanza que se estrene este año.