En medio del escándalo mediático que rodea a la conductora, comenzaron a circular versiones sobre posibles cambios en el programa dominical de Telefe.
En medio de una difícil situación personal que atraviesa Lizy Tagliani, tras las denuncias de Viviana Canosa, el conductor Mariano Iudica visitó el programa La Peña de Morfi el pasado domingo y a partir de ahí comenzaron a circular los rumores de un posible reemplazo.
En la pasada emisión, el animador parecía haberse instalado en el estudio de televisión y tal es así que hay quienes aseguran que desde Telefe le habrían ofrecido un puesto de conducción allí, aunque el conductor desmintió la hipótesis.
Sin embargo, el trascendido podría estar relacionado con una confusión ya que se cuenta con la posibilidad de que el ex participante de Bake Off Famosos quede al frente de un programa los sábados en el canal de las pelotas.
Tal como refirió el periodista Adrián Pallares, Lizy no está preocupada, pero sí muy atenta a la adopción de su hijo. Si ambas opciones serían viables, aunque la alternativa con más fuerza apunta al magazine que conduciría los sábados con el estilo de “La Cocina del Show”.
Lizy Tagliani sigue en el centro de la polémica y, en esta oportunidad, sostuvo que sus productores “no se aguantan una” tras haber maltratado a un joven que se ocupaba de enfocar los planos en el programa de streaming Olga.
Tras el conflicto, una gran cantidad de colegas acusaron a Tagliani de haber “destratado” o tenido “aires de superioridad”.
En cuanto se buscó poner a los trabajadores del detrás de escena en una posición inferior, la conductora refutó: “Los productores son más poderosos que nosotros. Me llevo re bien con mis compañeros, nunca tocamos el tema hasta que salió en la tele. Estoy feliz en Olga”.
“La pasamos bárbaro, pero sí noto que si por ahí lo hubiera hecho en otro contexto, no pasa nada. Un poco desbordada estoy”, continuó y añadió que, según su relato, el conflicto no habría llegado a mayores: “Nadie me dijo nada, re buena onda”.
“Es una cosa que nos decimos todo ahí y lo vivo así. Los chicos no (...) Son chicos jóvenes que no se aguantan una y tienen mucha personalidad, no es como en nuestra época que hablaba el que tiene poder, se callan todos y después murmuran”, concluyó.