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Abila está cada vez más cerca y Espinoza sólo tiene que firmar. Benedetto seguirá, Pavón todavía forma parte del plantel, y Centurión, a pesar de que se despidió, conserva una chance de continuar. Y a fin de año volvería Tevez...
Hay muchos equipos que se arman de atrás para adelante, pero Boca quiere ser todo lo contrario y pretende tener un gran poderío ofensivo para lo que viene.
Con vistas a la próxima Copa Libertadores, la idea es tener un plantel con grandes variantes ofensivas.
Para este mercado de pases, Cristian Espinoza está casi hecho y sólo falta ponerse de acuerdo en el tiempo del préstamo y la firma.
Por su parte, Ramón Abila, es otro que está al caer, aunque es una movida más de Daniel Angelici que de Guillermo Barros Schelotto.
En tanto, Darío Benedetto, el goleador del torneo, se quedará, Cristian Pavón por ahora está, y, por el momento, forman parte del plantel, Walter Bou, Andrés Chávez, Nazareno Solís, Oscar Benítez y Marcelo Torres. A fin de año se espera a Carlos Tevez, y, a pesar de que se despidió, todavía hay alguna chance de que continúe Ricardo Centurión.
El tema de Wanchope es el que más ruido está causando en este momento en el Mundo Boca.
El ex Huracán, es un viejo anhelo de Angelici, que admitió públicamente que es él quien lo quiere, más que el cuerpo técnico encabezado por el Mellizo.
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Para traerlo, el Xeneize debería hacerse cargo de la deuda que el Cruzeiro tiene con Huracán, y además aportaría dos futbolistas para el club brasileño, que saldrían de los siguientes tres nombres: Nicolás Colazo, Alexis Messidoro y Solís.
Una vez que se arregle la desvinculación del fútbol brasileño, el salario del jugador será un trámite, ya que se muere por ponerse la azul y oro y no tendría ningún inconveniente en cuanto a lo que perciba. Esta movida, también repercute en la vuelta de Tevez a fin de año. Los dos delanteros son muy amigos, comparten representante y a Carlitos le gustaría jugar con Wanchope.
Espinoza, como ya se dijo, está al caer, y habrá que ver qué pasa con Pavón. Hoy en día, una de las figuras del campeón, continúa en el plantel, pero su pase a Rusia todavía no está caído del todo. En tanto, Centurión está lejos de seguir, pero aún hay chances. Los casos de Bou y de Chávez son similares: si llega alguna buena oferta para venderlos o prestarlos, se irán, pero la intención es no reforzar a otro club del fútbol argentino.
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