"Este tema surgió a partir de que el otro día con San Lorenzo me hicieron responsable a mí de que el partido sea sin visitantes, y como venía River, pensé que era muy bueno y deportivamente podía salir un buen partido, y queríamos darle el marco. Hablé con Lugones, me dio el OK. Llamé a la mañana a Rodolfo, le pregunté si podíamos ir con visitantes, me dijo que sí. Hablé con la gente de Racing, me dio el consentimiento, tienen muy buena voluntad porque a la mañana me daban toda la ayuda para la parte organizativa e inclusive nos podíamos ocupar del tema de la venta de entradas. El problema es que River no quería hacerse cargo de la venta de entradas", dijo, en un extenso monólogo, Lemme, en diálogo con TyC Sports.
El pulgar lo bajó Juan Manuel Lugones, el titular de Aprevide: "Él me dijo esta mañana que el partido iba sin visitantes, al final. No le pedí explicaciones", afirmó. La gran complicación era la venta de localidades: River no quería hacerse cargo de la venta, mientras que a Defensa no le correspondía. En este tire y afloje, Lugones soltó.
Defensa y Justicia, de esta manera, perderá un millón de pesos: la recaudación, por no mudar el choque a Avellaneda, será la mitad. "Muchos hinchas estaban enojados y con razón, pero uno tiene que estar pensando en la parte económica", agregó.
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