El plantel xeneize, junto con el de All Boys, arribó a la Argentina tras una pesadilla que duró casi tres días. En el trayecto se perdieron billeteras y parte del equipaje. Ambos equipos volverán a entrenarse mañana por la tarde.
Se terminó la pesadilla: el plantel de Boca arribó a la Argentina esta tarde junto con el de All Boys luego de casi tres días de contratiempos.
El plantel xeneize le puso fin a una verdadera odisea y ahora sí podrá pensar en el duelo del sábado ante Quilmes, por la primera fecha del Torneo Inicial. Lo mismo el elenco de Floresta y su presentación ante Godoy Cruz, el domingo en Mendoza. Ambos planteles tendrán libre hasta mañana por la tarde, cuando reanudarán los entrenamientos.
Una de ellas dividió a Rolando Schiavi y al presidente del club de la Ribera, Daniel Angelici, luego de que el defensor se quejara y criticara la gira vía Twitter. Otra motivó una multa de parte de la Policía venezolana después que el plantel rompiera sillas para utilizar la madera en el fuego de un asado.
Cuando ya habían transcurrido varias horas de inesperados problemas, ambas delegaciones partieron ayer desde Venezuela. Sin embargo, el avión que los traía se desvió por causa de la intensa niebla que cubría al aeropuerto de Ezeiza. Aterrizaron en Córdoba y pasaron la noche en Villa Carlos Paz.
El último capítulo de la pesadilla fue esta misma tarde. A las 16 los planteles se embarcaron para despegar. Sin embargo, se anunció una demora de 40 minutos. De no creer. Para colmo, en el trayecto se perdieron billeteras y parte del equipaje. La odisea, sin embargo, llegó a su fin.
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