El entrenador de River, Marcelo Gallardo, confió tras la victoria conseguida ante Nacional en Montevideo que "volver a ser semifinalista de la Copa Libertadores es un orgullo. Es muchísimo el esfuerzo permanente que se hace y esto es un premio, una caricia".
Analizando el partido, Gallardo enfatizó: "Nos plantamos bien de entrada y con el correr de los minutos nos fuimos sintiendo cómodos. La expulsión del arquero de Nacional nos permitió abrir el camino". Y agregó: "Por momentos bajamos un poquito y les permitimos marcar, pero en el segundo tiempo volvimos a arrancar, Jugamos con mucho enfoque y concentración".
Luego, al ser consultado por el presente de Jorge Carrascal, el entrenador manifestó que "Jorge ahora está para jugar, antes no, pero ahora sí. Necesité que él pueda mostrar sus condiciones y empezó a hacerlo. Y, a partir de la confianza que va adquiriendo, va a encontrar su juego con más continuidad. Hoy demostró que es un jugador diferente".
Gallardo también sostuvo que "en el contexto en el cual nos toca vivir a todos, era difícil que pudiéramos estar en esta posición nuevamente. Por la larga inactividad que tuvimos, por la desventaja con equipos de otros países, pero así y todo yo creo que hubo los jugadores pusieron muchísimo empeño por tratar de superar las adversidades y estar de la mejor manera posible".
Por último, palpitando la semifinal ante Palmeiras, cuyo partido de ida se jugará en Avellaneda y el de vuelta en San Pablo, el entrenador de River analizó: "todos los equipos que llegan a una semifinal son durísimos. Merecen estar ahí, como los brasileños. Nos toca jugar con uno de los equipos invictos del certamen como Palmeiras y será una serie muy dura y pareja".
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