El paso de Marcelo Bielsa por el Olympique de Marsella enriqueció el archivo de YouTube. El rosarino, durante esas dos temporadas, se abrió a la tecnología: dejó que varias de sus charlas íntimas con los futbolistas se publicaran en internet. Hubo un video que dio la vuelta al mundo. Era un diálogo casual con los jugadores durante una práctica. Bielsa le hablaba a Benjamín Mendy, un juvenil de 20 años que comenzaba a ganar terreno en el primer equipo. "Mendy va a ser uno de los mejores marcadores de punta del mundo", le decía a sus dirigidos con Mendy ahí, entre ellos, que se reía con la timidez de los chicos.
Pep Guardiola cumplió la profecía tres años después: Manchester City le pagó 57 millones de euros al Monaco, dueño del pase del lateral izquierdo, y a los 23 años lo transformó en el defensor más caro de la historia. Es el sexto fichaje del conjunto inglés.
Aquella charla de Bielsa se repitió en los portales de noticias de todo el planeta porque dejaba una moraleja que excedía al fútbol: "Ser el mejor te quita felicidad. Te quita horas con tu mujer, te quita horas con los amigos, te quita fiestas, te quita diversión. El éxito te quita la posibilidad de ser feliz. Es una elección. Pero él tiene que saber. Si vos, Mendy, elegís que no querés ser el mejor del mundo, ¿qué problema hay? No hay ningún problema. Pero si vos querés vas a ser el mejor. Yo sería el tipo más feliz del mundo si vos sos el mejor marcador de punta de todos", le decía Bielsa. El video dura tres minutos y muestra a Bielsa inspirado: habla con la sabiduría de un catedrático. Los jugadores, mientras, lo miran como a un padre.
Mendy quedó atravesado por la experiencia Bielsa: "Me hizo aterrizar en otro planeta", dijo en una entrevista con la revista francesa Onze Mondial, publicada en mayo del 2017. "Me permitió hacer un salto enorme en mi carrera. Me hizo superar muchas barreras", siguió. Monaco fue el primer equipo en demostrar que Bielsa no estaba equivocado: en 2016 desembolsaron 13 millones de euros por su pase. Querían armar un plantel capaz de romper la hegemonía del PSG. El éxito fue inmediato. Mendy funcionó como una pieza clave para que Monaco volviera a salir campeón después de 17 años, para que alcanzara la semifinal de la Champions League.
Hace seis meses que Guardiola descubrió que Mendy solucionaría gran parte de su problema defensivo —y ofensivo. Pep sabía que para desarrollar el juego que él impone debía cambiar a sus marcadores de punta. En esa búsqueda, en este mercado de pases prescindió de Gael Clichy, Pablo Zabaleta y Bacary Sagna y sumó a Danilo, Kyle Walker y Mendy. "Siempre tuve en claro que quería jugar acá", aseguró Mendy en sus primeras declaraciones al sitio oficial del City. El aprendizaje continúa bajo la tutela de Guardiola.