
Mientras defendía públicamente el modelo asociativo, impulsó una operación privada en Europa con dinero vinculado a la entidad madre del fútbol local.
La Asociación del Fútbol Argentino sostiene desde hace años un discurso firme contra las Sociedades Anónimas Deportivas, puestas en agenda nuevamente desde el inicio de este ciclo gubernamental. Ese posicionamiento quedó bajo la lupa tras revelarse una operatoria que involucra a uno de sus colaboradores y protagonista reciente de los escándalos, Javier Faroni, señalado por promover en los hechos un esquema financiero opuesto al que defiende en público.
El empresario exlegislador y vinculado a la estructura administrativa de la AFA, participó en la compra del club italiano Perugia a través de un modelo de capital privado, según una investigación publicada por La Nación. La particularidad es que la financiación se habría realizado con fondos ligados a la Asociación del Fútbol Argentino.
La adquisición se concretó en 2024, cuando un grupo inversor tomó el 80% de las acciones del club fundado en 1905, que actualmente milita en la Serie C del Calcio italiano. Durante los doce meses previos, se transfirieron más de 5,7 millones de dólares hacia Sports NextGen Ltd, firma central en la operación, mediante 25 movimientos fragmentados entre enero y septiembre de 2025. El dinero salió de una cuenta del Bank of America a nombre de TourProdEnter LLC, controlada por Erica Gillette, esposa de Faroni, y los fondos terminaron en cuentas del Reino Unido y de las Islas Mauricio, en entidades como Revolut y Afrasia Bank.
Faroni con el equipo de Perugia (Foto: Agencia NA)
Según la documentación, los recursos provenían de ingresos por sponsors, derechos televisivos y amistosos de la Selección Argentina. Esos montos, por estatuto, deben destinarse al desarrollo del fútbol amateur y a fortalecer asociaciones civiles, no a inversiones privadas en el exterior.
La Justicia argentina investiga ahora el destino de unos 16,6 millones de dólares vinculados a la compra y financiamiento del Perugia, con allanamientos en propiedades del exlegislador, incluida su vivienda en Nordelta. En paralelo, la Federación Italiana de Fútbol aseguró que nunca fue informada sobre el origen de esos fondos, mientras el expediente sigue abierto en ambos países.