El símbolo religioso que fue hallado en el Parque de los Dinosaurios tenía poco más de 30 metros y podía verse claramente desde el aire. Aunque las autoridades municipales desconocen si se trató de un rito religioso u otra cuestión y no saben quién o quiénes lo hicieron, ya procedieron a removerlo.
El Parque de los Dinosaurios de Neuquén, un área dedicada a la conservación geológica y paleontológica, fue escenario de una misterio hallazgo que poco tiene que ver con lo que los científicos suelen encontrar durante sus trabajos en la zona. En las últimas horas apareció una cruz gigante hecha en el piso con vidrio molido y metales.
El símbolo religioso tenía poco más de 30 metros y podía verse claramente desde el aire. Las autoridades municipales desconocen si se trató de un rito religioso u otra cuestión y no saben quién o quiénes lo hicieron, aunque ya procedieron a removerlo.
"Respetamos cualquier manifestación religiosa, espiritual o artística, pero representa un peligro para la fauna y los visitantes", afirmaron para justificar la medida. El lugar, ubicado en el barrio Melipal, es un área protegida por la gobernación provincial. Según publicó el diario La Mañana de Neuquén, estaba compuesto de un contorno de lo que se conoce como piedra bocha y había sido rellenada con vidrio molido.
Desde el municipio informaron que el hallazgo se produjo el pasado viernes y que la Subsecretaría de Medioambiente y Protección Ciudadana tuvo que montar un operativo de limpieza para despejar la zona. Por el momento no hay pistas sobre quién lo hizo y para qué.
"Realmente es llamativo que ocurra algo así, porque la cruz fue realizada con cosas que no están en el lugar. Equivale decir que el vidrio fue transportado y debe haber llevado varias horas su colocación", explicó Francisco Baggio, responsable del mencionado ente municipal, en diálogo con LU5.
Llama la atención que el lugar no tiene acceso para vehículos, por lo que tuvieron que trasladar todo a pie para hacer la cruz. En la misma entrevista radial, el funcionario contó que para la remoción trabajaron siete personas por espacio de casi seis horas.
"No entendemos cómo hicieron para instalar la cruz sin que nadie se diera cuenta. Tampoco entendemos del simbolismo", declaró Baggio, a la vez que precisó que "la cantidad de vidrio molido extraído era equivalente a un bolsón de arena que se utiliza para las obras de construcción". "Aparte hubo resto de residuos que también tuvimos que erradicar", sumó.
Si bien por el momento no hay pistas sobre quién lo realizó ni para qué, el funcionario municipal llamó a "reflexión" a quienes lo hicieron porque es un "lugar protegido". "Por ahora solo tenemos conjeturas, pero no certezas de lo ocurrido. Creemos que fue un trabajo de varias personas y descartamos que haya sido algo artístico porque sino habría fotos o imágenes distribuida en las redes", confió.
El subsecretario de Medio Ambiente y Protección Ciudadana neuquino también indicó que "no se está en contra de ningún tipo de expresión", siempre y cuando tengan la autorización correspondiente por ser un espacio público. "En las áreas protegidas, esto está terminantemente prohibido. No hay lugar a interpretaciones. No se puede. El parque es un sitio de suma importancia para la provincia porque forma parte de lo arqueológico, paleontológico y geológico del neuquino. No sólo es un espacio recreativo y de esparcimiento, sino que también tiene un uso científico y debemos cuidarlo", cerró.