Las autoridades de Italia detuvieron este jueves a 48 personas, entre ellos empresarios y políticos, por colaborar con mafia calabresa Ndrangheta e informaron que se investiga al exdiputado de la Unión de Demócratas Cristianos (UDC) Lorenzo Cesa.
La operación "Basso profilo" (Perfil bajo), coordinada por los fiscales de Catanzaro (sur de Italia), tuvo un saldo trece personas detenidas con prisión en cárcel y otras 35 con el arresto domiciliario, según indicaron fuentes de la investigación.
Entre los detenidos hay numerosos profesionales y funcionarios al servicio de la mafia, como el consejero de Presupuestos del Gobierno de Calabria, Francesco Talarico.
Por otro lado, entre los investigados en el caso destaca el secretario del partido Unión de Demócratas Cristianos (UDC), Lorenzo Cesa, quien fue diputado hasta 2014 y eurodiputado hasta el 2006.
Cesa, cuya casa en Roma fue allanada en la madrugada de este jueves por la policía, según informaron los medios de Italia, renunció inmediatamente a su cargo en la UDC y declaró que es inocente y que desconoce los hechos criminales que se le imputan. Se le investiga por colaborar supuestamente en los negocios de empresarios próximos a los clanes de la mafia calabresa.
La UDC de Cesa, alineada con los partidos de la derecha italiana, cuenta con tres bancas en el Senado y sigue participando en la vida política del país hasta el punto de que el pasado martes votaron en contra de la continuidad del Gobierno de Giuseppe Conte.
La investigación policial permitió a algunos empresarios que supuestamente colaboraban con las familias más poderosos de la 'Ndrangheta, como las que controlan las localidades de Crotone, Isola di Capo Rizzuto o Cutro, todas en territorio calabrés.
También se descubrieron flujos de fondos por más de trescientos millones de euros y fueron secuestrados bienes como empresas, inmuebles, vehículos y cuentas bancarias.
Al frente de esta operación está el fiscal de Catanzaro, Nicola Gratteri, que dedicó su vida a investigar y perseguir a la mafia calabresa, una de las más potentes del Europa y presente en medio mundo dedicada al tráfico de drogas, entre otros graves delitos.
Gratteri, con custodia policial durante los últimos treinta años, llevó a 443 sujetos acusados de pertenecer o colaborar con la "Ndrangheta", en el mayor juicio celebrado contra esta organización criminal y el segundo mayor proceso contra la mafia desde el que juzgó a la Cosa Nostra siciliana en 1986
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