Rusia registró su primer fármaco contra el coronavirus en forma inyectable de efecto directo, el cual logra reducir significativamente el tiempo de infección en el organismo.
Se trata de una versión en forma inyectable del Areplivir, el mismo fármaco ya lanzado en pastillas en junio de 2020, y ha sido autorizado por un período de cinco años, tras un ensayo clínico realizado bajo la supervisión del académico Dmitri Pushkar, de la Academia de Ciencias de Rusia, que confirmó la eficacia y seguridad del medicamento para su uso en los hospitales.
"La forma inyectable del fármaco se caracteriza por una biodisponibilidad del 100 % y una penetración y distribución en las células más intensiva, una duración de la concentración terapéutica en el tejido más larga, así como un perfil de seguridad mejorado", afirmaron desde Promomed, la farmacéutica que desarrolló el medicamento.
El medicamento comenzará a ser suministrado en hospitales rusos a fin de año.