Un amante de los “animales exóticos” de 31 años de edad murió por estrangulamiento luego de que su pitón de 2 metros y medio escapara de su confinamiento y lo abrazara en lo que los expertos llamaron una “muestra de afecto”.
El hecho tuvo lugar en agosto del año pasado, pero trascendió en las últimas horas a raíz de que el caso llegó a la corte, donde un juez decidirá sobre el caso.
La madre de Dan Brandon –el nombre de la víctima- le explicó a la prensa que el joven tenía en su casa de la localidad de Church Crookham (Hampshire, Inglaterra) nada menos que diez serpientes y doce tarántulas.
Sin embargo, todavía no se tiene seguridad de que haya sido Tiny (Peque), una pitón africana que fue bautizada así debido a que cabía en su mano cuando la conoció, la responsable de su muerte.
El médico forense Andrew Bradley le contó al Daily Mail que, de acuerdo a los datos recabados por la policía “no tenemos nada aparte de la presencia de Tiny en el cuarto por lo que debemos pensar que ella ha sido instrumental en la muerte de Dan”. De todas formas, Bradley no cree que Tiny haya querido agredir a Brandon, sino todo lo contrario. “No creo que haya sido una agresión ni una lucha, sino más bien una muestra de afecto, un momento de paz”, agregó.
Según el forense, el animal sufrió un “shock” tras ver cómo Branon se desplomaba ante su abrazo, y por eso se escondió en el cuarto hasta que llegaron las autoridades.
Asimismo, la madre de Dan Brandon dijo en la corte que Tiny “amaba” a su hijo, que a su vez la trataba como “su bebé” aunque estaba bien al tanto de la fuerza que la pitón podía llegar a ejercer ya que llevaba 16 años coleccionando serpientes.
Otros médicos que revisaron el cuerpo de Brandon aseveraron los dichos del forense ya que no encontraron nada que no hiciera suponer la causa de la muerte no fuera por asfixia.