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Solange Cáceres, la fiscal que entiende en la causa del siniestro que le costó la vida a tres personas, quedando otra malherida, pidió que la aprehensión del conductor Ariel Gastón Pérez se convierta en detención
La fiscal Solange Cáceres pidió que la aprehensión del conductor que atropelló y mató a tres personas en la localidad de Sarandí se convierta en detención, a partir de las pericias del caso y las imágenes de distintas cámaras de seguridad que son contundentes, en relación a su responsabilidade en el trágico episodio.
Así lo solicitó la fiscal a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nro. 3 Descentralizada de Avellaneda ante el Juzgado de Garantías, quien imputó a Ariel Gastón Pérez, de 41 años, que manejaba el Chevrolet Corsa con el que causó las muertes, por el delito de "triple homicidio culposo".
Pérez, que manejaba ebrio, quedó aprehendido el pasado martes en horas de la tarde, luego de protagonizar el fatal siniestro vial, en el que perdieron la vida tres personas y una cuarta resultó con heridas graves. El acusado declaró ante la fiscal Cáceres que no recordaba nada de lo que pasó en el momento del incidente y en medio de la indagatoria, según trascendió, pidió perdón a las familias de las víctimas.
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El trágico hecho ocurrió el último martes en la avenida Mitre al 2200, de Sarandí, cuando Pérez, de 41 años, manejaba a alta velocidad un Chevrolet Corsa. Por razones que aún se investigan, el vehículo embistió a la motocicleta en la que viajaban Luis Butone y Valeria Pascual, y se subió a la vereda, por donde caminaba un peatón, que fue identificado como Eduardo Arauz, de 22.
Tras el impacto, las víctimas cayeron a unos diez metros del lugar donde ocurrió el choque y como consecuencia tres personas murieron en el lugar. En tanto, uno de los transeúntes, de 24 años, fue llevado con lesiones graves, tales como una fractura expuesta al Hospital Pedro Fiorito de Avellaneda, donde quedó internado en estado reservado.
El vehículo siguió su marcha durante varios metros y cruzó el bulevar de la avenida Mitre, donde finalmente paró y el conductor quedó apresado, al igual que su primo que lo acompañaba, en medio de un intento de linchamiento por parte de los testigos del siniestro vial.
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