El 24 de agosto festejó su cumpleaños en el boliche Chankanab de San Martín y cuatro semanas después apareció su cadáver. Seis personas imputadas, rituales umbanda, un abogado que confía tener la escena del crimen y una madre que pide justicia. La línea de tiempo para entender, paso a paso, la causa
En la mañana del 24 de agosto Melina Romero salió del boliche Chankanab. Había cumplido 17 años y fue a festejarlo con sus amigos. A las 6.46 horas se fue rodeada por un grupo de personas. Fue la última imagen que su madre Ana María vio de ella porque un mes después el cuerpo apareció en las inmediaciones de un basural de José León Suárez, dentro de una bolsa y en avanzado estado de descomposición.

A partir de ese momento se tejió un ovillo en el que hubo dudas que involucran testimonios diversos, un supuesto ritual umbanda con drogas y hasta testimonios que primero conocieron "el manto de sospecha" y pueden resultar decisivos para la causa.

A dos meses de su desaparición, el abogado de la familia Romero, Marcelo Boindi, consideraque "esa misma noche la mataron debido a que la data de muerte de la autopsia tiene coincidencias".

Por la causa se encuentran con prisión preventiva Joel "Chavito" Fernández (18), Elías "Narigón" Fernández (20), y Fernando (17). En las últimas semanas se sumó el César "El Pai" Sánchez, que habría participado en una fiesta umbanda en su casa que incluyó drogas, según testimonios de una de las testigos clave, y se liberó a Javier "El Pelado" Rodríguez (44) por pedido del propio Biondi debido a que "no había pruebas suficientes".

"Creo en la justicia divina. Dios decide cuándo nos vamos de este mundo. Pero pido que los responsables del asesinato de Melina reciban el castigo merecido y justo por el daño que causaron. No sólo destruyeron la vida de mi hija, sino que arruinaron a toda su familia", pide Ana María, al igual que el padre Rubén Romero, en diálogo con DIARIO POPULAR.

Las últimas imágenes de Melina son las de la puerta del boliche y si bien se intentó obtener las tomadas por cuatro cámaras del basural del CEAMSE cercano a donde se encontró el cadáver, resultó imposible "porque fueron víctimas de actos de vandalismo", señaló el letrado de la familia.

Sucesos en la investigación del caso Melina Romero:

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Otro impedimento, según resalta Boindi, son los celulares de los investigados que presentan la complicación de que "pudieron haber cambiado de chip y también son jóvenes que generalmente están sin crédito para hacer llamadas o mandar mensajes".

Desde Chankanab, la tarjetera Tamara, quien declaró en la causa, asevera ante este medio que "Melina nunca trabajó en el boliche. Ella trabajaba el Soultrain". Por lo tanto, las palabras de Melody y la "testigo clave" resultan ser hasta el momento fundamentales.

La "testigo clave" afirmó que a la adolescente la tiraron en el puente del  Buen Ayre, pero antes la introdujeron en una bolsa, en el espacio del asiento delantero de un auto cuando aún respiraba y apenas se movía. Ese vehículo llevaba un frasco con drogas.

Boindi cree que en la causa se va avanzar y asegura: "La escena del crimen la tenemos descripta con total detalle". Aunque prefiere guardar silencio por el momento para no entorpecer las cosas.

"Ella era pura luz, alegría y pasión por vivir. Estos monstruos le arrebataron todo eso", se expresa con bronca la mamá, que pide justicia.

 
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