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Una militante de la revista "La Garganta Poderosa" que observó cómo subían a un menor a un patrullero increpó a los efectivos involucrados en el hecho, que la demoraron en la comisaría.
Micaela Brambilla, una militante del colectivo “La Garganta Poderosa” que observaba cómo un grupo de efectivos de la Policía de la Ciudad que habían detenido a un menor de edad en el barrio porteño de Caballito, los increpó en la vía pública indicándoles que no podían realizar el arresto. Como respuesta, los policías le pidieron el DNI y la demoraron en la comisaría por 7 horas.
El hecho ocurrió este domingo por la tarde en la esquina de Río de Janeiro y Díaz Vélez cuando un grupo de efectivos que se movilizaban en dos patrulleros detuvieron a un adolescente de 13 años a bordo de una motocicleta. Micaela, que salía de hacer las compras en un supermercado que se encuentra ubicado frente al lugar de los acontecimientos, comenzó a filmar el procedimiento mientras les indicaba que no les estaba permitido llevarse al menor. Los efectivos, algunos de los cuales no estaban correctamente identificados porque tenían su placa en el chaleco antibalas que había dejado en el patrullero, le respondían con evasivas. Uno de ellos le indicó inclusive que no se llevaban al menor, sino a la motocicleta.
“También sacale fotos a la moto”, le dice uno de los policías en el video, subido a la página de Facebook de
“Trabajo en Infancia y sé que tiene que optar por otro procedimiento cuando hay un menor. Y además no están identificados. ¿Dónde está su identificación?”, le dice Micaela a uno de los policías que la enfrentaban.
En determinado momento, uno de los efectivos le pide su documento a la joven con el objeto de agregarla en el acta que labraba como testigo. “Yo no salgo como testigo mientras haya agentes sin identificar”, se niega ella.
La filmación de una detención de menores es totalmente legal, mientras que la policía no tiene potestad para llevarse a una persona detenida por esta acción. El Centro de Estudios Legales y Sociales de Argentina (CELS) aseguró a través de Twitter: "No hay leyes que impidan filmar el accionar de agentes de la policía. La detención de la militante de La Poderosa es arbitraria".
En charla con el portal Infonews, la abogada y titular del Centro de Estudios en Política Criminal y Derechos Humanos, Claudia Cesaroni, explicó: "Estoy esperando que me dejen verla y que la liberen porque esta detención es totalmente ilegal, sino presentaremos un habeas corpus".
La joven fue retenida por los efectivos más de tres horas en la calle, tras lo cual consiguieron una orden para detenerla bajo el cargo de “resistencia a la autoridad”. Micaela fue llevada a la Comisaría 11, ubicada a pocas cuadras de allí, donde poco tiempo después se congregaron varios militantes de “La Garganta Poderosa” a pedir su libertad a gritos.
Finalmente, y tras la gestión de Nora Cortiñas, de la Línea Fundadora de Madres de Plaza de Mayo, Micaela fue liberada.
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