El hecho ocurrió en un almacén situado las calles Mar del Plata y Cerrito, en esa localidad del partido de Merlo, en la zona oeste del conurbano, donde se encontraba la víctima, de nombre Mabel, junto a su marido, apodado "Pepino", y un empleado de ambos.
Fuentes judiciales informaron que todo comenzó cuando los comerciantes se disponían a cerrar el local y arribaron cuatro delincuentes en dos motocicletas que se estacionaron en la vereda, los amenazaron con fines de robo y los obligaron a ingresar nuevamente al almacén.
Una vez en el interior, los asaltantes, uno de ellos con un arma de fuego y otro con un arma blanca, le exigieron a Mabel la entrega del dinero al tiempo que le aplicaron a "Pepino" un culatazo en la cabeza que le ocasionó un corte en el cuero cabelludo.Una fuente judicial explicó que si bien no hubo ningún "forcejeo o resistencia" de parte de los comerciantes, la mujer "se puso nerviosa", a raíz de lo cual, uno de los delincuentes le aplicó al menos una puñalada.
"Mi mamá les dio todo, toda la plata. No tenían necesidad. La degollaron, tenía todo el cuello cortado y le dieron puñaladas en la espalda", expresó a la prensa Melisa, una hija de la almacenera, y agregó que su mamá quedó tirada sobre "un charco de sangre".
De acuerdo a los voceros, los delincuentes se apoderaron de unos 25.000 pesos en efectivo y escaparon, mientras que Mabel fue auxiliada por sus familiares que la llevaron en un auto particular hasta un hospital de la zona donde los médicos constataron su muerte.
"La mataron como a un perro. Se me fue lo mejor", dijo, con la voz entrecortada por el llanto, "Pepino", a quien los médicos debieron colocarle un vendaje en la herida del cuero cabelludo.
Y agregó: "Pedimos justicia, que nos ayuden, nunca le hicimos mal a nadie, soy laburador, toda mi vida laburé para mis hijos, para la gente. Pido que haya más seguridad y control, que controlen las motos principalmente, nada más".
"Roben pero no maten"Por su parte, otro hijo de Mabel dijo que los delincuentes "se ensañaron" con su madre ya que le aplicaron "cinco puñaladas", sin embargo, el vocero judicial consultado confirmó que la autopsia estableció que la muerte se la produjo un profundo corte en la nuca.
"Mi viejo no se merece sufrir como está sufriendo. Labura todos los días, le da trabajo a la gente del barrio que lo necesita. La verdad que no sé por qué pasó esto, no sé cómo vamos a seguir ahora", añadió el hombre. El homicidio, por el que no hay detenidos, es investigado por personal de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 8 del Departamento Judicial Morón, a cargo de Adriana Suárez Corripiom, quien ordenó una serie de pericias para obtener datos.
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