Perpetua para dos hombres por el crimen de una policía

La decisión del Tribunal Oral Criminal Nro. 4 de Quilmes recayó sobre Jorge Cuesta Gatti y Raúl Yagaimini por el crimen de Alicia Del Valle González (de entonces 59 años y que revestía con el grado de capitana en la Policía bonaerense).

La pena máxima que le fuera impuesta a estos dos hombres coincidió con el pedido de la fiscal de juicio, María de los Angeles Attarian Mena, quien solicitó que sean condenados por el delito de ‘homicidio premeditado”. En tanto, los defensores requirieron a los jueces Alberto Ojeda, Federico Merlini y Mario Caputo la absolución por falta de pruebas, pero esto fue rechazado en el veredicto.

El hecho se registró el 8 de agosto de 2013, cerca de las 20.30, en la esquina de las calles 139 y 17 de Berazategui, cuando la capitana Del Valle González manejaba su Renault Duster 0km. para dirigirse a visitar a sus hijas y en esas circustancias,fue sorprendida por, al menos, tres desconocidos que le cruzaron un Ford Focus y sin mediar palabra, efectuaron varios disparos.

‘El robo había quedado descartado porque los homicidas dispararon mientras la interceptaban. Fueron directamente con intenciones de matarla’, señaló, en su oportunidad, uno de los investigadores del caso, ya que el móvil de esa agresión a balazos nunca quedó debidamente esclarecido.

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Ante los tiros, la mujer policía se identificó como tal y extrajo su pistola reglamentaria con la que se tiroteó con los sujetos y a raíz del enfrentamiento, la víctima recibió diez impactos de bala en el abdomen, piernas y brazos. Uno de los atacantes, luego identificado como Saúl Vega, sufrió un impacto en el pecho, pero fue rescatado por sus cómplices, quienes lo subieron nuevamente al auto y huyeron, aunque poco después del hecho lo abandonaron ya muerto a unos 10 metros de una sala de primeros auxilios de la zona.

Por su parte, Alicia Del Valle González fue trasladada en una ambulancia al Hospital Evita Pueblo de Berazategui, pero falleció mientras era operada.

De acuerdo a los investigadores, la patente del Ford Focus quedó grabada en una cámara de seguridad y así se determinó que el auto no era robado sino que había sido comprado por la esposa de Cuesta Gatti.

Al seguir esa pista, se dijo, detuvieron cinco días después del crimen a los dos acusados durante un allanamiento en la localidad de San Francisco Solano, donde también se secuestró el vehículo, que aún conservaba manchas de sangre.

Además, encontraron en una de las puertas del coche, un proyectil y determinaron que había partido de la pistola utilizada por la policía asesinada. También en el operativo, incautaron dos revólveres calibres .32 y .38, los cuales fueron peritados para establecer si alguno de ellos fue el utilizado para asesinar a la capitana.