Pidieron prisión perpetua para acusado de un femicidio

Durante su alegato ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 4 de Morón, el fiscal del juicio, Hernán Moyano, junto a su colega Florencia Demasi, pidió que se condene a Cristian Halliú (37) por el delito de “homicidio agravado por el vínculo” de Laudonio (34).

Además, la solicitud fue acompañada por la abogada María Inés Terrizzano, representante de la familia de Laudonio en su carácter de particular damnificado.

En tanto, la defensa oficial del acusado le reclamó a los jueces Pedro Rodríguez, Juan Carlos Torti y Rodolfo Castañares que el imputado sea absuelto, al considerar que no fueron suficientes las pruebas presentadas durante el debate.

En forma subsidiaria, solicitó que condenado a la pena mínima de ocho años que establece el Código Penal por el delito de “homicidio simple”. Luego de las exposiciones de las partes, los magistrados le permitieron a Halliú hacer uso de su derecho a pronunciar sus “últimas palabras”, ante lo que el imputado se puso de pie y, dirigiéndose al tribunal, dijo: “Soy inocente”.

Los alegatos se realizaron después de tres audiencias celebradas esta semana, en las que testificaron los padres y hermanas de la víctima. Además declararon tres hombres que trabajan en una remisería cercana a la vivienda donde ocurrió el hecho, quienes aseguraron haber escuchado gritos durante la madrugada del día del crimen, provenientes del domicilio.

También se presentaron como testigos un perito que actuó en la investigación y un psicólogo que aseguró que el acusado estaba en sus cabales al momento de cometer el asesinato.

Al finalizar la audiencia, el padre de la víctima, Rodolfo, manifestó: “Halliú no solamente mató a mi hija, sino que mató la niñez de mis nietos, y por eso debe pagar con la pena máxima”.

“Queremos que se haga justicia, queremos que los jueces se pongan de nuestro lado, porque a mi hija le dieron veintidós puñadas”, concluyó. La sentencia se conocerá el miércoles 22 de noviembre a las 9 en el segundo piso de los Tribunales de Morón, ubicados en Colón 1708 de esa localidad.

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El crimen de Laudonio se registró cerca de las 4.20 del 6 de marzo de 2016, en una casa situada en Curuchet al 1600, de la mencionada localidad del oeste del conurbano, donde la mujer se encontraba con sus tres hijos, dos niñas de ocho y diez años y un varón, de tres, este último fruto de su relación con el presunto femicida.

En base a lo reconstruido por los investigadores, el asesino arribó al lugar a bordo de un Peugeot 206 color negro, saltó las rejas de hierro del frente de la vivienda y luego violentó una ventana para poder entrar.

Una vez dentro de la casa, el agresor sorprendió a Laudonio en la habitación en la que descansaba, la apuñaló varias veces y escapó, mientras que la mujer alcanzó a llegar hasta el baño, donde cayó desvanecida.