Una madre de 35 años y su hija de 15 fueron mordidas en los brazos y en las piernas al ser atacadas por tres perros pitbull, en la capital de Jujuy.
Los hechos ocurrieron en el Asentamiento Bicentenario del barrio San Pedrito cuando los tres perros que realizaron el ataque escaparon de su domicilio y sorprendieron a la familia que se encontraba fuera de su casa lavando un sector de la vereda.
Los vecinos que observaron lo que sucedida pudieron llamar al sistema de emergencias para el envío de una ambulancia con personal del SAME que al llegar brindó los primeros auxilios a las heridas.
“Las mujeres tenían mordeduras de los canes en las extremidades debido a que intentaron protegerse del ataque de los animales y se recuperan favorablemente”, indicaron fuentes policiales y agregaron que no hubo denuncia por un acuerdo al que llegaron con el dueño de los animales.
Hace 10 días había ocurrido otro ataque, en este caso el resultado fue el fallecimiento de un bebe de 2 años por las múltiples mordeduras del perro, el cual era propiedad de su familia. El acontecimiento fue en San Salador de Jujuy.
Según lo que se supo del caso, el animal ingresó al inmueble desde el patio del fondo y comenzó a morder al menor cuando la madre se había ausentado de la vivienda, provocándole graves heridas en la cabeza y otras partes del cuerpo.
Al ver como su perro estaba atacando a su pequeño hermano, dos niños mellizos de 10 años intentaron defenderlo arrojándole agua al perro, con lo que lograron que vuelva al fondo de la casa, y salieron a pedir ayuda a vecinos, quienes fueron los que llamaron al servicio de emergencias.
A la casa concurrió la fiscalía de turno y personal de criminalista para realizar las tareas de rigor, mientras que los médicos del SAME avanzaron en brindar contención a los hermanos del menor y a la madre.
“Alterado y agresivo” calificaron como estaba el perro en un centro de zoonosis del Municipio cuando se lo llevaron de la casa donde ocurrió el ataque.
El cuerpo de Bomberos de esta ciudad trasladó los restos del pequeño a la morgue judicial por disposición fiscal, mientras que el Departamento Contravencional local comenzó con las tareas informativas, debido a que el animal era propiedad de la familia del fallecido.