Durante más de 7 horas, el Jefe de Gabinete de la Nación, Marcos Peña, brindó su primer informe del año en el que no faltaron acalorados debates con los legisladores kirchneristas, a quienes les pidió: “Háganse cargo de algo”.
Entre otras cosas, hizo un crudo análisis sobre la educación, ratificó que el Gobierno no tiene en sus planes convocar a una paritaria nacional docente y llamó a los dirigentes políticos a realizar una fuerte autocritica y a trabajar juntos “por encima de las diferencias políticas”.
“Cuando vemos la brecha entre lo público y lo privado, que fue ocultado en la última evaluación de calidad… lo podemos ocultar, nos podemos enojar, podemos chicanear; cada uno se puede hacer cargo de lo que le toca de acuerdo a los años que estuvo (en el gobierno), pero nosotros planteamos una salida, un desafío”, manifestó.
Peña remarcó que los resultados están relacionados “con el nivel de calidad de vida de los padres, el territorio donde se evalúa y el nivel de educación de la madre”.
“La cultura del paro docente fomenta la fuga hacia la escuela privada”, sentenció Peña.
“(Las paritarias) deben hacerse con los empleadores directos que son las provincias. Son las provincias las que pueden decidir un 0 por ciento (de aumento) como hizo Santa Cruz o un 30 o 40 por ciento como hicieron otras provincias”, argumentó al exponer en el recinto de la Cámara Baja, donde fue citado para brindar un informe de gestión y para responder las consultas de los legisladores.
Peña reconoció que “existen problemas pendientes en materia salarial", pero consideró que "también en materia de formación docente para ver cómo hacemos para estimular a los docentes”.
Acompañado por su equipo de trabajo, Peña comenzó a hablar a las 11:40 -40 minutos después de lo previsto- y, posteriormente, empezó a responder las preguntas de los legisladores, en una sesión que se prolongó durante más de siete horas.
En ese sentido, los cruces más picantes los tuvo con los diputados del Frente para la Victoria Héctor Recalde y, Axel Kicillof, a quienes les reclamó "hacerse cargo" del país que le dejaron al gobierno actual. Rechazó que le hayan cortado los medicamentos a los oficiales e insistió, a diferencia de lo que había manifestado el ex ministro de Economía, en que Argentina no creció en los últimos cinco años.
"Qué amor tienen ahora por la verdad", llegó a chicanear Peña en una respuesta a Recalde.
A su turno, la diputada Graciela Camaño, de la Federación Unidos por una Nueva Argentina, defendió enérgicamente a los maestros y pidió que ellos “no sean la variable de ajustes”.
“No nos vengan con verso. No nos vengan a hablar del futuro. Cómo carajo no vamos a estar de acuerdo que hay que resolver el tema educativo pero no vengan con proyectos faraónicos”, sostuvo enfática la legisladora. Y afirmó: “Usted no puede seguir echándoles la culpa a los maestros. Los maestros son trabajadores. Solo reclaman un salario justo”.
Esta ocasión fue la quinta en la que, en lo que va de la gestión de Cambiemos, Peña concurre al Congreso.