En la primera sesión de la cámara de Diputados del año, ocurrió un hecho inédito desde el cambio de gobierno, en 2015: se le dio media sanción a una ley por unanimidad. Con los 211 camaristas presentes que votaron a favor, el proyecto presentado por Carlos Castagnetto, del Frente Para la Victoria, consiguió aprobación total y ahora pasa al Senado.
Si bien el proyecto tiene varias aristas, hay tres cuestiones fundamentales. Por un lado, prevé que los electrodependientes —personas que necesitan de equipamiento especial, eléctrica, para vivir— no paguen sus facturas de luz. Algunas familias que tienen algún integrante electrodependiente llegaron a pagar $2.000 de luz por mes, una cifra desorbitante.
También les otorgarán a cada familia un grupo electrógeno sin cargo. De esto se ocuparán las empresas, sean de la jurisdicción que sean. De esta manera, cuando sufran un corte de luz, podrán cubrirse con el grupo electrógeno. Antes, cada corte significaba un problema: los obligaban a hacer traslados a hospitales, o a buscar hospedaje en casas de otras familias.
Finalmente, el Estado creará un registro nacional de electrodependientes. Hoy en día, no hay números fehacientes de cuántas personas en el país padecen este tipo de problemáticas. Y obligarán a todas las empresas a tener un 0800 que funcione las 24 horas, los 365 días del año, para atender a los pacientes.