Presentaron Plan de Acción en Derechos Humanos

‘La lucha por la defensa de los derechos humanos es una tarea continua y un compromiso de todos los argentinos. Hoy vivimos un tiempo diferente, elegimos cambiar y estamos integrados en el mundo, decididos a cumplir con nuestros compromisos’, dijo el primer mandatario y convocó a ‘seguir trabajando por una Argentina que nos incluya a todos’ durante el acto realizado en el Museo Casa Rosada en el que también expusieron detalles del plan el ministro de Justicia, Germán Garavano, y el secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj.

A diferencia de lo que ocurría durante los actos que solía encabezar Cristina Kirchner sobre esta temática, no se observaron en Casa Rosada a referentes como Hebe de Bonafini ni a Estela de Carlotto.

En el gobierno dijeron que la titular de Abuelas de plaza de Mayo habló el lunes con Avruj y se excusó por problemas de agenda en La Plata, de donde es oriunda, pero que estuvo en el acto el histórico abogado de la entidad, Alan Lud. También dijeron presente el cacique quom Felix Díaz y representantes del CELS, Amnesty Internacional, Unicef y el Alto Comisionado de la ONU.

Durante el encuentro se hizo mención a los derechos de los pueblos originarios. Consultado por este medio por el conflicto con grupos mapuches en Bariloche, en el que murió el joven Rafael Nahuel, un funcionario dijo que ‘estamos asistiendo a la familia del chico, con distintos elementos, y además la justicia aún investiga qué ocurrió’ durante el desalojo en Villa Mascardi.

El plan de DD.HH., además, cuenta con cinco ejes específicos: Inclusión, no discriminación e igualdad; Seguridad pública y no violencia; Memoria, verdad, justicia y políticas reparatorias; Acceso Universal a Derechos; y Cultura Cívica y compromiso con los derechos humanos. Fue elaborado sobre la base de un trabajo conjunto de 18 ministerios de la Nación y establece 243 compromisos prioritarios de acción.

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En este sentido, Macri apuntó que forman parte de los ‘cien objetivos prioritarios de este gobierno’ -definidos hace un año en ocasión del retiro espiritual de Chapadmalal, el mismo que se acaba de postergar hasta febrero-, en consonancia con los tres ejes principales de la gestión: ‘reducir la pobreza, combatir el narcotráfico y unir a los argentinos’. En su alocución, el jefe de estado anticipó que entre los desafíos por encarar figuran ‘recibir una educación de calidad, tener las mismas oportunidades que los demás, contar con agua potable y cloacas, con energía que no contamine, hacer sociedad y comunidades sostenibles, que sea delito atentar contra el ambiente’.

El jefe de estado puntualizó que ‘las políticas de memoria, verdad y justicia incluidas en este plan, así como las acciones reparatorias, todos los derechos de inclusión, no discriminación e igualdad están garantizados’. Entre los compromisos prioritarios se destacan, elaborar el Plan Nacional contra la Discriminación (2018-2022), presentar un Plan Nacional de Igualdad de Oportunidades (2018-2020), implementar el Cuerpo de Abogadas/os contra la Violencia de Género, entre otros.

‘Estoy acá porque creo en un estado que genere las condiciones para que cada persona viva donde viva tenga la edad que tenga, pueda elegir cómo vivir, pueda desarrollarse en libertad’, sentenció el presidente. Un día después que la UCA diera su clásico informe en el que indicó que aún persisten en el país un 31% de pobres, Macri admitió que ‘creo que la pobreza es inaceptable, sí, inaceptable’.

Por su parte, el ministro Garavano remarcó que el plan ‘marca un antes y un después en el abordaje integral de los Derechos Humanos’.

En su discurso, Avruj señaló que estas garantías ‘son transversales a la política de Estado y que no pueden ni deben ser utilizados ni ideológicamente, ni en forma partidaria, ni ser capturados por nadie porque son de la gente y para la gente’.

En diálogo con este diario, Avruj explicó también los motivos de la diferenciación con la anterior gestión. ‘Tuvo logros indiscutibles, como la reapertura de los juicios o leyes por la diversidad sexual, pero cerró su agenda en los temas de lesa humanidad y no trabajó en una agenda ampliada. Y, por otro lado, también hubo contradicciones muy fuertes como a quienes sí y a quienes no se atendía’.