Así lo revela un informe de la ONG Buenos Aires que también señala que los mismos produjeron más de 15 homicidios, una cifra estremecedora que pone en vilo a los siempre indefensos abuelos.

Una ONG alertó que, en el Area Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), se han llevado a cabo 1.500 ataques a jubilados en lo que va del año, lo que dio lugar a más de una quincena de homicidios.

En un nuevo informe sobre Delitos, Inseguridad y Violencia, desarrollado por la ONG Defendamos Buenos Aires, con la asistencia de la Consultora Miglino y Asociados y que toma como punto de partida las causas penales que instruye la justicia Nacional de Instrucción de la Nación más los casos de los juzgados penales de Lomas de Zamora, Quilmes, San Isidro, San Martín, Morón, Moreno y La Matanza, quedó acreditado que la inseguridad sigue siendo el peor de los flagelos que padecen en Buenos Aires los jubilados.

Hace 48 horas, un jubilado fue asesinado a golpes en Luis Guillón frente a su mujer. Los asesinos le dijeron a la mujer, al irse: "Disculpe señora, nos dieron mal el dato". Los asesinos ingresaron a robar a una vivienda ubicada en la localidad de Luis Guillón, partido de Esteban Echeverría, donde revolvieron todo durante media hora en busca de una gran suma de dinero que no existía. Todo mientras torturaban y le pegaban al dueño del hogar: un jubilado de 81 años que fue asesinado a golpes por los ladrones en frente de su mujer. El violento episodio comenzó a las 3 de la madrugada, cuando un hombre utilizó un criquet para forzar la ventana de la casa, correr las rejas y entrar. Una vez dentro, se dirigió a la habitación donde se encontraba Lila, la mujer de la víctima, a quien despertó y, bajo amenaza, la obligó a abrirle la puerta a sus otros dos cómplices que aguardaban afuera. Cuando el grupo estuvo completo atacaron sin miramientos a Daniel, el esposo de la señora, a quien en cuestión de segundos ataron de pies y manos mientras lo obligaban con piñas y torturas a decirle donde tenían escondida su plata. No se referían simplemente a sus ahorros, sino a una cantidad importante de billetes que alguien les había informado que poseían. Ante la desesperante situación, su esposa procedió a darles todo lo que había en el hogar, donde tenían la jubilación completa que habían cobrado apenas unos días atrás y sus dos alianzas de oro que en cuestión de minutos se convierten en el maldito "oro manchado con sangre" en plena calle Libertad en Tribunales o en Cabildo y Juramento en Belgrano.

"Siempre la impunidad, siempre la muerte y lamentablemente siempre terminan siendo nuestros queridos viejos las víctimas", explayó Javier Miglino, abogado experto en Seguridad y Director de Defedamos Buenos Aires.

Por otro lado, Miglino sostuvo que "hace varios meses que alertamos que en Belgrano, una banda de ex presidiarios se instaló en las veredas de las calles Tres de Febrero, Manuel Ugarte, Congreso y Roosevelt. Los delincuentes, muchos de ellos con pedido de captura vigente, han violado una chica en una panadería de Las Cañitas, uno de los criminales apareció muerto, flotando en los Lagos de Palermo; algo que no ocurría desde la última dictadura militar y varios de ellos se dedican a robar a jubilados.

La modalidad es simple; un señor mayor o una señora vienen caminando por la Plaza Alberti (Roosevelt al 1800), le piden plata. Al dársela, le pegan y le sacan todo lo que tienen. Ocurre lo mismo en Tres de Febrero y Manuel Ugarte y en la zona de los Lagos de Palermo. Los jubilados, en estado de pánico porque saben de la impunidad que gozan, nunca hacen la denuncia. De hecho tres jubilados le confiaron a Defendamos Buenos Aires que el delincuente detenido por haberle arrojado un caño a Ramiro, un muchacho que pasaba con su camioneta por el Túnel de Avenida del Libertador y La Pampa, los había atacado tiempo atrás para robarles, lo que demuestra que impunidad para atacar ancianos en Belgrano es lo que sobra".

Bajo esta línea, el titular de Defendamos Buenos Aires rememoró: "Días atrás, Teresa Pepe, una jubilada de 72 años, perdió la vida tras ser asesinada de cuatro puñaladas en el cuello en su casa de Quilmes Oeste. Un delincuente que resultó ser el vecino de al lado, trepó la pared medianera, le robó y la asesinó para buscar asegurarse la impunidad de su crimen, lo que en Derecho se conoce como homicidio 'criminis causa', el peor delito que existe en el Código Penal de la República Argentina con pena de reclusión perpetua sin posibilidad alguna de conmutación de pena o libertad condicional. El asesino se llama Yonatan Molina, de 24 años y con antecedentes penales. Su propio padre lo entregó a la Policía Bonaerense y quedó detenido en el acto. Se cree que entró a la casa de la víctima para robarle y luego matarla.

El caso es investigado por la fiscal Ximena Santoro, de la UFI N°7 de Quilmes. La tragedia ocurrió en una casa de la calle Intendente Olivieri al 3.600 y fue descubierto por uno de los tres hijos de la víctima, que al no recibir respuesta telefónica de la señora a lo largo de todo el día, se alertó y dirigió hacia su casa. Allí, encontró el cuerpo con aparentes signos de tortura en el piso de la cocina. Sin embargo, la testigo más importante del hecho fue la tía del presunto asesino, que informó haberlo visto alrededor de las 16:30 saltando la medianera del domicilio de Pepe. Molina, según el relato, llevaba dos televisores LED y una bolsa con carne que escondió debajo de una escalera. Sin embargo, este terrible episodio de violencia es solo uno de los 14 que debieron padecer nuestros abuelos en apenas un par de meses de 2024, en los cuales perdieron la vida".

No obstante, Miglino alertó que en provincia de Buenos Aires "las cosas no están mejor", ya que en las zonas de "San Justo, Ramos Mejía, Isidro Casanova, Rafael Castillo y Lomas del Mirador; todos en La Matanza, son pocos los ancianos que se aventuran a salir a la calle después de las 17".

"Ocurre algo similar en San Martín y Loma Hermosa o en Quilmes, Lomas de Zamora y Moreno. En todos los casos el denominador común es el miedo por parte de nuestros viejos a sufrir un robo violento que no solo les quite lo poco que tienen, sino que los deposite en la guardia de un urgencia de un hospital de la zona", lamentó.

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