El Halcón fue más rápido que el caballo del comisario

Defensa le ganó al tiempo, a la maña y al rival. Fue mejor, hizo más que el conjunto albirrojo, pero fue la fortuna la que terminó de torcer un rumbo que parecía fijado. Es que no se había jugado la mitad del primer tiempo que Pablo Dóvalo le anuló un gol completamente lícito a Gabriel Alanís, quien había rematado con el arco casi libre. Cobró falta de Juan Miritello, la figura del partido, quien lícitamente desplazó al arquero visitante con el hombro.

Minutos después, antes de acabar el primer acto, Maximiliano González vio la roja en un cruce en el que todo lo que sucedió se debió a las condiciones del terreno de juego. Sin embargo, Dóvalo interpretó que un hombre que viene deslizándose casi sin fricción con el terreno de juego fue a disputar de forma excesiva y mostró apurado la roja. Las cosas se ponía difíciles para el Halcón hasta que Gonzalo Goñi la clavó en propia puerta intentando desviar un centro.

En la cita que se llevó adelante en un Norberto Tomaghello que resistió estoico la tormenta, Defensa salió con Enrique Bologna; Ezequiel Cannavó, Santiago Ramos Mingo, Emanuel Aguilera y Alexis Soto; Kevin Gutiérrez, González, Nicolás Palavecino y Gabriel Alanís; Luciano Herrera y Juan Bautista Miritello.

Por su parte, los conducidos por Fernando Berón formaron con Marcelo Miño; Diego Pavia, Nicolás Capraro, Gonzalo Goñi y Rodrigo Insúa; Siro Rosané, Rodrigo Herrera, Iván Tapia y Marco Iacobellis; y Jhonatan Candia y Maximiliano Zalazar.