El menor era abusado por su propia madre, una maestra jardinera que fue condenada semanas atrás a 11 años y 3 meses de cárcel.
El Tribunal Oral en lo Criminal N° 1 de Quilmes condenará al acusado de distribuir material pornográfico infantil de un niño autista de Bernal, el cual era abusado por su propia madre y filmado con un celular, quien mantenía una relación sentimental con él y le enviaba los respectivos videos, en tanto que la Fiscalía defensora pide 40 años de pena por los delitos de abuso, distribución y corrupción de menores.
Se trata de un aberrante caso que tuvo en el foco a una maestra jardinera de un establecimiento educativo de Don Bosco, quien semanas atrás fue condenada a 11 años y 3 meses de prisión. Es por ello que, con el fin de cerrar esta lamentable etapa, los próximos días serán claves para los jueces, quienes decidirán el monto que le aplicarán al pederasta. Cabe destacar que, al momento de los hechos, estaba radicado en la provincia de Neuquén y, cuando lo allanaron, tenía en su poder decenas de imágenes y contenido filmográfico que exponían a la víctima en una situación de vulnerabilidad sexual.
Es por ello que la doctora María de los Angeles Attarian Mena, en el juicio, pidió que se lo condene por “abuso sexual reiterado; corrupción de menores y distribución de pornografía infantil”. Lo cierto es que durante la etapa en la cual debieron probar la perversidad del sujeto, las autoridades mostraron fragmentos de dicho material, mientras que los presentes debieron pedir por favor que no reproduzcan más. El pequeño, al momento de los abusos perpetrados por quien debería abogar por su bienestar, tenía solo 7 años de edad.
El acusado, identificado como Damián Llanes (50), siguió la cita en una sala anexa ya que no quiso estar presente en la audiencia pública, para no dar la cara. Llegó a la cita detenido y permanecerá en dicha condición hasta saber su futuro. Es por ello que los jueces Fernando Celesia, Cecilia Maffei y Elbio Ramos (subrogante) darán a conocer la semana próxima la sentencia que lo pondrá tras las rejas por todo el daño cometido y por haberle arrebatado la infancia de una manera tan brusca a un chico que, además, pertenece al espectro autista.
Los episodios ocurrieron en 2019 y, según los sabuesos cibernéticos que trabajan en la Justicia, fueron más de 74 fotos y videos los que este comercializó en diversas plataformas. Todos estaban almacenados en su teléfono celular y eran recibidos directamente de parte de la madre del chico, quien al momento era su pareja. El fiscal Daniel Ichazo, especializado en delitos sexuales contra menores de edad, fue quien llevó los hilos de la investigación y que ordenó las distintas medidas para aprehenderlo.
Tanto la víctima como su hermano mayor, fueron apartados y puestos a resguardo con familiares cuando salieron a la luz los hechos. En tanto, la abusadora aceptó los cargos en un juicio abreviado y ya está condenada.
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