El Día Mundial del ACV es una oportunidad para concientizar sobre esta condición que representa una de las primeras causas de mortalidad y la primera de discapacidad en el mundo

El accidente cerebrovascular (ACV) es una condición que se produce por la interrupción brusca en el flujo sanguíneo del cerebro. Como este deja de recibir el oxígeno y los nutrientes necesarios, es posible que muera el tejido cerebral. Como consecuencia de este daño pueden perderse las funciones que dependen de la parte afectada del cerebro.

Se reconocen dos tipos de ACV: el más frecuente, denominado “isquémico”, que se produce a partir de la obstrucción de una arteria cerebral; y el “hemorrágico”, que se debe a la formación de un hematoma en el tejido a causa de la ruptura de una arteria cerebral. Ahora bien, ¿cómo podemos darnos cuenta de que una persona está sufriendo un ACV? Los síntomas aparecen de manera repentina:

- Debilidad en partes del cuerpo como en la cara, el brazo o la pierna.

- Dificultad para hablar o comprender el habla.

- Sensación de mareo o inestabilidad.

- Pérdida de la visión de un ojo como si se bajara un telón.

- Cefalea intensa que se siente como un estallido que no se compara con ningún otro dolor de cabeza que se haya tenido antes.

El ACV es más frecuente en los varones, aunque en las mujeres produce mayor número de muertes. Las probabilidades de padecer lo aumentan a partir de los 55 años. También es importante considerar si se tiene antecedentes familiares de ACV.

Hay condiciones médicas que pueden aumentar el riesgo. Por ejemplo, entre ellas se encuentra la hipertensión, la alteración de los lípidos sanguíneos (colesterol, triglicéridos), la enfermedad carotídea, la diabetes, las arritmias cardíacas, enfermedades de las válvulas del corazón y trastornos hematológicos.

A su vez, ciertos hábitos de vida resultan perjudiciales y pueden elevar el riesgo, como el tabaquismo, el uso de algunos anticonceptivos (especialmente en mayores de 35 años y fumadoras),el uso a largo plazo de la terapia de reemplazo hormonal (por ejemplo para el manejo de la menopausia), la inactividad física (sedentarismo), la obesidad y el abuso de drogas.

Existen excelentes profesionales especializados en diagnóstico, tratamiento y rehabilitación de personas que han sufrido un ataque cerebral o bien están en riesgo de un primer evento.Mañana, 29 de octubre, se conmemora el Día Mundial del ACV.

Es una oportunidad para concientizar sobre esta condición que representa una de las primeras causas de mortalidad y la primera de discapacidad en el mundo. Sin embargo es importante tener presente todos los días de qué se trata un ACV, cuáles son sus síntomas y qué factores inciden en las probabilidades de padecerlo ya que es una manera de estar atentos, prevenir y cuidarnos.

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