
Fue la contundencia Pincha al cien por cien. Una muestra de personalidad digna de un León que rugió más fuerte que el débil Lanús en el Estadio Jorge Luis Hirschi, donde Estudiantes se impuso con un carácter notable y derrotó con justicia al Granate por 2-1 con goles de sus delanteros Mauro Boselli, desde los doce pasos, y Leandro Díaz.
Aunque la ventaja arrancó con un penal dudoso que Patricio Loustau cobró por una mano casual de Yonathan Cabral, el equipo de Ricardo Zielinski justificó la victoria. Fue mucho más que la visita y, sin ser vistoso, minimizó por completo la idea de Jorge Almirón para llegar a los 9 puntos en la zona B de la Copa de la Liga.
El sentido de pertenencia que se respira en 1 y 57 se hizo valer con un guiño a la historia cuando Mauro Boselli, una de sus leyendas, abrió la cuenta desde el tiro castigo. Corrían 36 minutos del primer tiempo al momento en el que el delantero se hizo cargo de la ejecución y le sacudió el arco a Fernando Monetti con un misil inatajable.
El duelo de estilos se lo quedaba el Pincha, que manejaba los tiempos del partido fortalecidos en la fuerte base que proponen Jorge Rodríguez y Fernando Zuqui en el mediocampo. Mientras, Lanús perdido. Sin encontrar la pelota y apenas dañino cuando la pelota le llegaba al pibe José López, el único que se preocupaba por crear juego.
En el segundo tiempo se asentó la superioridad de Estudiantes. Estuvo a tiro de ampliar la diferencia con un centro venenoso de Manuel Castro que casi se le mete al Mono Monetti y luego con un errado increíble de Franco Zapiola debajo de los tres palos con la bandeja servida.
Hasta que el golpe nocaut que estaba al caer llegó. Leandro Díaz, ingresado justamente por Boselli, recibió dentro del área en una buena posición, amagó dos veces para su zurda y desenfundó un disparo que se colocó junto al caño derecho del golero granate: 2-0, justo y necesario.
Los del Sur, pese al desconcierto, se encontraron con el descuento a cuatro minutos del final por intermedio de Matías Pérez, aunque solo para decorar el resultado, porque Lanús reflejó que aún siente el cimbronazo de la salida de Luis Zubeldía y no logra acomodarse al nuevo ciclo de Miguel Almirón.
Estudiantes, apostando a lo suyo, ganó los tres compromisos que tuvo y llega entonado al partido de ida por la fase preliminar de la Copa Libertadores, el próximo miércoles, a las 21.30, frente a Audax Italiano, en Chile.