Independiente es la caldera del Diablo. Eliminado prematuramente de la Fase Campeonato de la Copa Diego Maradona, pero lo que es peor con idas y vueltas, indefiniciones y desprolijidades, sobre la continuidad de Lucas Pusineri como técnico. Y la frutilla del postre es la calentura con la que un símbolo glorioso de la historia como Jorge Burruchaga se fue del club, con una frase que todavía está retumbando en la sede de Avenida Mitre y en todos los rincones rojos del país: "Independiente hoy no tiene rumbo".
Muy caliente, el ex manager Jorge Burruchaga aseguró que el club de Avellaneda "no tiene rumbo", lamentó que la dirigencia no lo respetó en su cargo al tomar decisiones sin consultarlo, y dijo que ante esa situación a él le quedaban dos caminos, seguir igual o irse, y optó por el segundo.
"No me respetaron como mánager, no se me llamó a la reunión y no me preguntaron por la renovación del técnico. Cuando me dicen que no vaya a una reunión donde debían elegir al entrenador, me pareció una falta de respeto", sostuvo Jorge Burruchaga en declaraciones a TyC Sports e ESPN.
Y agregó: "Lamentablemente, Independiente hoy no tiene rumbo. Los dirigentes no pueden estar todo el tiempo en el club y el fútbol te demanda estar siempre. Hay reuniones de comisión y conmigo que debían hacerse y no se hacían, no me gustó eso".
Tras explicar que como los dirigentes tomaron decisiones sin consultarlo entonces había dos caminos: seguir "pintado" en el cargo o rise. Y decidió irse: "No me gustó la manera en que me voy, pero antes de ser un estorbo para Independiente doy un paso al costado y cuento las razones por el bien el club", dijo Burruchaga y agregó: "Vine a Independiente por el club y por la gente, para armar un equipo bueno. Me hubiera gustado traerle a Pusineri los refuerzos que quería, pero no había plata, sólo era para pagar deudas", agregó Burru, campeón con el Rojo de Libertadores e Intercontinental con el Rojo en 1984.
Lucas Pusineri se plantó y exigió que en las próximas horas le digan si le van a renovar porque de lo contrario deja de dirigir las prácticas y lógicamente no estará el fin de semana al frente del equipo ante River.
Y el problema es que hay voces divididas en la comisión directiva que encabeza Hugo Moyano. Y es que antes de la eliminación ante Lanús por Sudamericana su hijo Pablo anunció públicamente que le renovaban el contrato.
El vínculo de Pusineri finalizó el 31 de diciembre pasado y la extensión del vínculo iba a firmarse ese día, pero debió postergarse para el sábado por una deuda que desde la institución mantienen con el técnico, pero ahora nadie se anima a dar una fecha probable. Pusineri se reunió ayer en Villa Domínico con Walter Lusnig, integrante del Departamenteo de Fútbol, y le dio un plazo de 48 horas para que se defina la renovación o no del contrato.
Sin chances de pelear por el título de la Copa Diego Maradona y eliminado en cuartos de final de la Copa Sudamericana, Independiente buscaría un cambio de timón. La primera propuesta de los dirigentes había sido terminar la mencionada Copa pero el entrenador se puso firme y exigió que le aseguren hasta diciembre 2021: según trascendió, si esto no ocurre en las próximas horas, Pusineri dejaría el cargo.