Marcos Rojo dijo que hay que bancar a Sebastián Battaglia

En referencia a la situación que vivió el DT en la previa del cruce con River y tras la victoria por 1-0 sobre su clásico rival, el defensor contó: "En la semana se habló mucho de la situación de Sebastián y un poco te pone incómodo porque estamos trabajando en el día a día con él. Es nuestro entrenador, tenemos que bancarlo y respaldarlo. Con palabras es más fácil, pero había que respaldarlo adentro de la cancha".

Rojo no dejó pasar el momento de mostrar su felicidad luego de celebrar en el Monumental y expresó que ante River el equipo fue "inteligente" y que jugaron "de igual a igual".

"Yo, adentro de la cancha estaba tranquilo. Ellos tuvieron sus chances y Agustín (Rossi) respondió muy bien, pero nosotros también tuvimos varias claras", continuó en diálogo con TyC Sports.

En respuesta a las declaraciones de Marcelo Gallardo donde expresó que Boca se había llevado "mucho premio", Rojo opinó: "Dice que lo que nos llevamos fue injusto, pero nosotros hicimos nuestro trabajo, sabíamos nuestras debilidades y aprovechamos las oportunidades que tuvimos".

El jugador de 31 años también habló sobre los incidentes que acontecieron con los hinchas del Millonario cuando querían dejar la cancha y dirigirse a los vestuarios: "Algunos de los chicos más jóvenes hicieron gestos y no está bien lo que hicieron. Pero fue un momento feo el que pasamos con los botellazos al salir. Por ahí en la calentura hicieron algún gesto que no estuvo bien".

Por último, el defensor hizo hincapié en la tan comentada camiseta amarilla: "En la semana no se habló de la camiseta, del chamán ni de otra cosa. Sólo de River. Igualmente, cuando terminó el partido con Estudiantes, pensé que teníamos que jugar de nuevo con esta camiseta".

En otro pasaje de la entrevista, el exjugador del Manchester United dijo que "volver a Estudiantes fue más difícil que el domingo pasado. Era reencontrarme con la gente de nuevo después de la pandemia, porque me tocó jugar pero sin público".

"Eso hace que te pasen muchas cosas por la cabeza. Me preparé, hablé con la gente que trabajo para preparar el partido y me dijeron que lo tome con calma. Traté de hacer mi trabajo, de jugar al fútbol y de que nada de lo que pasaba alrededor influya en mi juego y mi estado de ánimo", confesó.