
El Xeneize cerró la temporada con la caída en semifinal del Torneo Clausura y varios referentes y nombres históricos del plantel no continuarán mientras se define el proyecto para el próximo año, con la Libertadores en el horizonte.
La caída de Boca en las semifinales del Torneo Clausura ante Racing, que cerró otro año sin títulos y golpes duros, pero con clasificación directa a la Copa Libertadores, generó un temblor puertas adentro y aceleró decisiones que ya venían gestándose. Juan Román Riquelme tiene definido que varios futbolistas no continuarán en 2026 y el recambio será profundo.
La primera certeza pasa por por Cristian Lema, quien quedará libre al finalizar su contrato a fin de diciembre pero está relegado desde su lesión en 2024 y no volvió a tener continuidad. Otro nombre que cierra su ciclo es Frank Fabra, que no renovará tras diez años en el club, apenas sumó cuatro partidos en 2025 y todo indica que volverá a su país. Algo similar ocurre con Ignacio Miramón, a préstamo desde Gimnasia, y Boca no efectuará su compra tras un semestre con poca participación.
Riquelme ya analiza su próximo mercado de pases como presidente azul y oro.
Entre las dudas aparece Javier García, que termina contrato y aún no resolvió si seguirá como arquero o si se sumará al club en otro rol. Además, hay jugadores que podrían emigrar según el nuevo entrenador, como el caso de los dos laterales derechos, Luis Advíncula y Lucas Blondel; también Leandro Brey, en busca de minutos; Nicolás Figal, Agustín Martegani y Lucas Janson, con futuro a evaluar; Exequiel Zeballos, que tiene pendiente su renovación para 2026; y Edinson Cavani, que definirá si continúa con la mira en la Copa Libertadores.
Mientras se ordenan las salidas, la dirigencia ya mira hacia adelante. La prioridad para el 2026 será reforzar la delantera, aunque todavía no hay nombres concretos. El próximo mercado marcará el inicio de una reconstrucción profunda en el plantel.