El presidente Sebastián Piñera decretó un nuevo toque de queda este martes en diferentes ciudades de Chile y regirá en toda la región metropolitana, en el marco de varios días de conflicto político social en el país vecino que ya se cobró la vida de 15 personas.
La medida repercute por cuarto día consecutivo en Santiago de Chile, Valparaíso y Concepción. En el resto del país, de norte a sur, se extenderá a la provincia de Iquique y la ciudad Alto Hospicio (región de Tarapacá), las localidades de Copiapó, Vallenar y Caldera (región de Atacama), las comunas de La Serena y Coquimbo (región homónima), Rancagua (región de O’Higgins) y la sureña comuna de Valdivia (región de Los Ríos).
Además de los toques de queda, el Gobierno también amplió el estado de emergencia a la comuna de Arica, en la frontera con Perú, en la región de Arica y Parinacota, que hasta el momento permanecía fuera de las medidas de excepción.
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También en la norteña región de Antofagasta el estado de emergencia se extendió a las comunas de Tocopilla, Mejillones y Calama.
Únicamente la austral región de Aysen permanece sin ningún estado de emergencia, y en el resto de país las medidas comprenden en algunos casos ciudades, provincias o regiones completas.
El Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) contabilizó que 1.333 personas fueron detenidas a lo largo de las protestas, 181 niños o adolescentes, desde el sábado, y constató que 88 personas se encuentran hospitalizadas por heridas de arma de fuego, cinco de ellas en estado grave y una con riesgo vital. simismo, el INDH informó de que ha interpuesto 12 querellas por denuncias de torturas y apremios ilegítimos.
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